Un video que circula en redes sociales captó el momento en el que un policía en Michigan, Estados Unidos (EU), logró salvar a un bebé, cuyos labios se habían vuelto azules debido a la asfixia. Logró que recobrara la respiración. El uniformado detuvo a la familia que iba a exceso de velocidad y en cuanto se dio cuenta del problema ayudó para salvarle la vida al pequeño.
Esa fue la razón por la que apresuradamente iban a exceso de velocidad, la madre y el tío del bebé, quienes se dirigían a toda velocidad al hospital cuando fueron detenidos por dos policías de Michigan, quienes al ver la emergencia y los lamentos de desesperación de los tripulantes del automóvil, decidieron darle atención al bebé para salvarle la vida.
“Ayuda, ayuda, ayuda, tenemos un bebé que va a morir”, clama la madre del pequeño de 18 meses, quien contrariada por la situación llama a un oficial con las manos para que compruebe la emergencia.
En las imágenes se observa a dicho policía acercarse al auto y pedirle a la madre que le deje ver al bebé, pero estos se niegan y piden que los dejen seguir conduciendo por la carretera para ir al hospital. La madre explica que el niño comenzó a tener convulsiones.
Luego, el otro uniformado carga al bebé y les dice que necesita aire. El tío se tira al suelo implorando que los dejen seguir su camino y la madre desesperada les dice a los policías que no se lo lleven y pide a su pequeño de regreso. Por un momento, el policía con el menor logra calmarlos.
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¿Quién es el valiente policía que ayudó al bebé?
De acuerdo a medios locales, Brendan Fraser es el valiente policía quien al ver la emergencia, masajea al bebé en la zona abdominal, le da unas pequeñas palmadas en la espalda y lo recuesta en el cofre del carro, mientras a los padres los calma y les dice que el pequeño ya ha comenzado a respirar. “Todo está bien”, asegura.
La última imagen capta la llegada de más unidades policiacas que llegan en auxilio y se observa al pequeño que logra recuperarse. En Michigan, Estados Unidos, al conductor no se le multa, ni se le detiene por exceso de velocidad cuando se presenta una emergencia real.