Todos sabemos que andar de un lado a otro con un bebé es un poquito complicado, pero ¿Qué pasa cuando nos tenemos que subir a un avión?
Algo básico, lleva un chupón porque con él se le destaparan los oídos a tu bebé, sobre todo en el despegue y el aterrizaje.
Lleva una mamila con agua porque no sabes en que momento puede tener sed.
Toma tu vuelo en las horas que sabes que tu bebé está tranquilo o que toma su siesta, y si se puedes pide que te lleven una cuna para que no lo tengas que cargar todo el tiempo.
Si se puede pide que te den un asiento en la ventana para que tú puedas controlar el paso de luz o para que tu bebé se asome y se entretenga.
En tu pañalera siempre lleva cerealitos y galletitas, no sabes en que momento le vaya a dar hambre.
¿Has viajado en avión con tu bebé?