El orgasmo femenino es la culminación de la respuesta sexual femenina. Se trata de una experiencia intensa de placer caracterizada por contracciones musculares rítmicas en la región pélvica. Si bien es similar al orgasmo masculino en términos de ser un punto máximo de excitación, existen diferencias significativas en cómo se experimenta y se alcanza.
Un estudio publicado en la revista especializada Sexologies, y realizado por una clínica privada de ginecología en Nueva York, Estados Unidos reveló cuál es la posición sexual con la que hay más probabilidades de que una mujer alcance un orgasmo.
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¿Cuál es la mejor posición sexual para alcanzar el orgasmo femenino?
Según la investigación, la posición sexual más favorable para alcanzar el orgasmo femenino es “cara a cara/mujer arriba, y cara a cara/hombre arriba”, popularmente conocida como “misionero”.
Sin embargo, los expertos destacan que dicha posición debe ejecutase con el apoyo de una almohada debajo de la cadera para aumentar la fuerza gravitacional pélvica masculina en la dirección del clítoris, que es el órgano femenino cuya única función es proporcionar placer.
¿Por qué?
Dado que los orgasmos femeninos dependen de la estimulación del clítoris, las posiciones cara a cara tienen más probabilidades de conducir al orgasmo porque maximizan la estimulación del clítoris y el flujo sanguíneo.
Según el estudio, desde una perspectiva biomecánica, las diferentes posiciones coitales varían en su potencial para estimular el clítoris y en el flujo sanguíneo de éste. Pero, en el caso de la posición del “misionero”, ésta otorga una mayor estimulación del clítoris y el flujo de sangre a diferencia de otras posiciones sexuales.
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¿Cómo fue posible saber esto?
Los investigadores realizaron modelos biomecánicos de la pelvis de un hombre y una mujer en cinco posiciones coitales:
- Cara a cara/mujer arriba
- Sentados/cara a cara
- Cara a cara/hombre arriba (con almohada)Claves para ser sexualmente inteligente]
- Cara a cara/hombre arriba (sin almohada)
- De rodillas/entrada trasera
Posteriormente, identificaron y resaltaron las áreas de contacto entre las pelvis, y realizaron una ecografía del clítoris antes y después que una pareja de voluntarios sanos se involucrara en cada posición.
Según los expertos, tras las pruebas fue posible determinar que todas las posiciones sexuales mencionadas, excepto “de rodillas/por detrás”, provocan una gran cantidad de contacto con el clítoris, así como un aumento en el flujo sanguíneo. Pero sólo en la posición “cara a cara con almohada” se presenta una mayor fuerza gravitacional por parte de la pareja que empuja en la misma dirección que la fuerza de empuje, así como un aumento intenso del flujo sanguíneo del clítoris.
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Aumentar la posición cara a cara/hombre arriba con una almohada generó un componente de la fuerza gravitacional pélvica masculina en la dirección del clítoris; esto dio como resultado un mayor flujo sanguíneo a todos los componentes del cuerpo cavernoso, concluyó el estudio.
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