“En el mundo hay dos tipos de políticos y gobernantes aquellos que creen ya aceptan la naturaleza humana como es, y aquellos que quieren cambiarla y adaptarla a sus necesidades y circunstancias. Los primeros siempre son los exitosos, los segundos siempre acaban mal, acaban oprimiendo a su población”, a partir de esta premisa el doctor Luis Rubio reflexiona sobre la forma de proceder del actual gobierno.
Para ejemplificar esto, el experto usa como ejemplo a China:
“Quizá no hay mejor ejemplo que China, el contraste y la comparación entre Deng Xiaoping y Mao Zedong. Mao trató de cambiar a los chinos para hacerlos a su imagen y semejanza, mientras que Deng que lo sucedió unos años después”.
De acuerdo con nuestro colaborador, “Deng fue una persona que aceptó la naturaleza humana como era y trató de construir sobre ella, y en vez de oprimir a lo chinos, lo que hizo fue darle capacidad y posibilidad para que desarrollen todas sus capacidades”.
“Hoy sabemos, décadas después, qué Deng tenía razón; nada más hay que ver cómo ha crecido China, cómo se ha desarrollado y cómo se ha convertido en una potencia”.
Respecto a México, el analista señala que “hoy tenemos un gobernante que cree, igual que Mao, que debe someter, que debe controlar a toda la población, que debe cambiar al mexicano para que sea a imagen y semejanza de lo que él cree y puede lograr”.
En su opinión, “en vez de que nos dediquemos, y que los gobernantes de las décadas pasadas en México se hayan dedicado a utilizar el Tratado de Libre Comercio (TLCAN) para extenderlo a toda la población con reglas claras, con aceptación de cómo es la naturaleza humana que persigue su beneficio y el bienestar de la sociedad a partir del trabajo de cada quien”.
“Mientras eso no se haga, vamos a seguir siendo un país con enormes desigualdades, con enormes limitaciones pero sobre todo con una enorme fuente de conflicto”.
Para Luis Rubio, el punto de fondo es muy sencillo: “hay que aceptar la naturaleza humana como es, cambiarla sólo lleva al autoritarismo, a la guerra, a la violencia y nadie en México queremos eso”.
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