Luis Rubio señala que a nadie sorprendió que el presidente López Obrador enviara una iniciativa de ley para reformar a la industria petrolera.
“Él cree que el país puede prosperar con base en la demanda que genera Pemex, es decir, insumos de todo tipo, eso pasaba en los 70’s”
Rubio dice que México ya no tiene los recursos de entonces, la mayor parte de los pozos que existen, son los que estarán, es decir, que no se requieren tantos insumos como ocurrió en aquel momento.
“El petróleo cada día será menos importante en la generación de energía en México y en el mundo. México ya no produce lo que producía antes y casi todo lo que produce es para autoconsumo, lo que implica que la industria no será la fuente principal de crecimiento de la economía”
El analista asegura que tratar de reconstruir o recrear lo que existía en los 70’s es realmente perder el tiempo, lo que esto implica, es que “vamos a tener pleitos interminables” con todos los inversionistas mexicanos y del exterior que participaron en la industria hace seis u ocho años.
“Vamos a ver innumerables demandas y pleitos a través de los tratados de libre comercio y vamos a ver una industria paralizada, lo que quiere decir, es que vamos a tener un país cada vez más pobre con menos inversión y menos oportunidades“
Rubio menciona que en lugar de crear más empleos y fuentes de ingresos lo que “tendremos será un país menos competitivo, sin oportunidad de crecer, participar y desarrollarse”.
El analista asevera que es una “tristeza” que se esté destruyendo la industria nacional en aras de mantener un mito, una idea que nada tiene que ver con la realidad y el mundo de hoy.