Javier Solórzano dice que la marcha del domingo pasado, a favor del INE, sí tuvo sus efectos en diferentes ámbitos, y uno de ellos, han sido las reacciones del presidente, de gente cercana a él y de legisladores que descalifican a quienes salieron a las calles.
El periodista menciona que la marcha del domingo “pasó algo” y que ha sido la más importante en lo que va del sexenio, sobre sus políticas de gobierno y quizá, indirectamente, contra el presidente, porque la manifestación no sólo fue en la Ciudad de México, sino que estuvo repartida en más de 50 ciudades.
Solórzano asegura que todo ello generó controversia y diferentes formas de verse, para el presidente, el hecho de que la calle, que es su “hábitat natural” sea ganado por otros considerados “clase media” o “alta” es digno de considerarse, porque ellos en algún sentido le ayudaron a ganar.
A raíz de esto, el presidente propuso una marcha para el domingo 27 de noviembre y la “corcholata mayor” ya dijo que será una “fiesta popular”, todos han dicho que irán y se echará andar la “maquinaria” y Solórzano dice que esta manifestación será para demostrar fuerza y poder y enfatizar que la calle es de ellos, porque es el “hábitat natural” del presidente.
El periodista asegura que con todo esto la reforma electoral quedó en segundo plano porque lo que pasará el domingo 27 tiene que ver con un informe que hará el presidente porque sabe que su proyecto electoral no será aprobado.
“La marcha del domingo pasado pegó y ahora el presidente quiere mostrar su fuerza para decir que la calle es suya”.
Javier Solórzano