Alberto Barranco habla de la visita del Papa Francisco a Canadá para ofrecer una disculpa a las comunidades indígenas de ese país por los abusos, violaciones y muertes que generó la Iglesia Católica en las escuelas públicas en el siglo pasado.
El embajador Barranco explicó que el Papa Francisco calificó la visita a Canadá como una peregrinación penitencial; durante cuatro días se visitarán cuatro ciudades con la intención fundamental de llegar ante las etnias de los pueblos originarios de ese país para reiterarles una disculpa frente a las atrocidades que cometió en su contra en el pasado la Iglesia Católica.
De acuerdo con una investigación se descubrió que en los colegios que había creado el gobierno pero que administraba la Iglesia Católica y que tenían básicamente como educandos a niños de grupos autóctolos se habían cometido una serie de abusos de carácter psicológico, físico y sexual.
Desde fines del siglo XIX hasta la década de 1990, carca 150 mil niños inuit, mestizos o integrantes de los pueblos originarios (dene, mohawk, ojibway, crie, algonquin) fueron ingresados a la fuerza en 139 internados de todo el país. Aislados de sus familias, su lengua y su cultura, a menudo sufrieron abusos de todo tipo.
La investigación encontró cientos de tumbas sin nombre cerca de los internados, todos los cuerpos pertenecían a menores indígenas.
Alberto Barranco explica que en marzo pasado llegaron a Roma tres grupos de canadienses de pueblos originarios, estas etnias fueron recibidas por el Papa a quienes les habló de una disculpa, les habló de perdón y dio la promesa de visitarlos en fechas próximas.
El periodista señala que el viaje “estaba en alfileres en virtud de los problemas de movilidad que enfrenta el Santo Padre, sin embargo, en los últimos días ha sido exitoss una terapia intensa que recibe el Papa para tener mayor movilidad”.
“La intención de este viaje no es solamente reconciliarse con los pueblos originarios, sino también con el propio gobierno que encabeza el primer ministro Justine Trudeau con quién tendrá un encuentro personal”.
Alberto Barranco
La Iglesia Católica de ese país tiene un número de fieles es de 16 millones 800 mil “algo que si bien es minoritario no obstante es desdeñable”, concluye Alberto Barranco.