La comunidad afroamericana vive un momento de tensión tras las protestas por la muerte de George Floyd, pues ocurren en medio de la pandemia por el nuevo coronavirus, lo que pone la luz sobre desigualdades sociales y económicas históricas, que derivan en este grupo de la población, especialmente afectado por la pandemia de COVID-19.
Afroamericanos, víctimas del COVID-19
Las cifras de casos confirmados por COVID-19 en Estados Unidos se sitúan en un millón 854 mil 476, mientras que los decesos suman 107 mil 235.
Según datos revelados por el gobernador Andrew Cuomo, hasta el mes pasado, Nueva York es el epicentro de la pandemia y reporta que el 28% de las muertes por coronavirus son personas afroamericanas.
En Luisiana, apenas un 32% de la población es afroamericana, sin embargo, la mayoría de las víctimas de la enfermedad son de raza negra.
Cerca del 60% de los muertos con coronavirus en Washington DC son afroamericanos, una cifra desproporcionada teniendo en cuenta que solo representan un 46% de la población de la ciudad.
En Milwaukee, los afroamericanos representan el 70% de las muertes con coronavirus, siendo solo el 26% de la población.
En Michigan, con 854 muertes, los afroamericanos son el 33% de los infectados y casi un 40% de los muertos.
¿Por qué los afroamericanos son los más afectados por COVID-19?
Políticos y expertos han apuntado a diversas causas que puedan explicar por qué el virus está pegando fuerte en las comunidades afroamericanas.
Según reporta el New York Times, los indicadores iniciales muestran que es menos probable que los médicos remitan a los afroamericanos a hacerse pruebas de diagnóstico del coronavirus cuando visitan una clínica aunque tengan síntomas de COVID-19 por cuestiones raciales.
Además, los afroamericanos tienen más probabilidad de no tener un seguro médico y retrasar el ingreso en un hospital, pese a tener síntomas acordes con el coronavirus.
Otro punto revela que los estadounidenses negros y otras minorías representan mucho mayor porcentaje frente a la población blanca en la fuerza de trabajo, lo que los coloca en mayor riesgo de contraer la enfermedad tanto en el trabajo como en los desplazamientos diarios.
Afroamericanos son víctimas de problemas económicos
El Departamento del Trabajo reveló que el número de estadounidenses que perdieron su empleo al menos temporalmente por la pandemia de coronavirus supera los 42 millones, en su mayoría afroamericanos.
Varios estudios han reflejado la persistente discriminación de los negros, por ejemplo, a la hora de buscar un trabajo. La Oficina Nacional de Investigación Económica comprobó que las personas con nombres asociados a la piel negra, como Lakisha o Jamal, reciben la mitad de llamadas de trabajo que si su mismo currículo llevase un nombre típico de los blancos, como Greg o Emily.