México, entre los 10 países más atractivos para invertir: CEESP
Las expectativas para México son favorables, lo que le ha permitido ubicarse dentro de los 10 países más atractivos para invertir, destacó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su informe semanal “Análisis económico ejecutivo”, afirmó que México tiene fortalezas importantes para consolidar un proceso de recuperación con elevado ritmo de crecimiento y bienestar social, aunque se requiere hacer esfuerzos adicionales para consolidar el mejor entorno de negocios para crecer.
Apuntó que del 6 al 8 de mayo se llevó a cabo en la Riviera Maya la reunión del Foro Económico Mundial sobre América Latina (WEF Latam), cuyo interés se centró en buena parte en que América Latina y en especial México, se han convertido en puntos de interés para detonar negocios.
Por ello, subrayó, debe avanzarse en estos temas con el afán de mejorar la posición en el ranking mundial de competitividad, lo que en buena medida es un elemento que fortalece a México como destino para la inversión.
Refirió que el objetivo del WEF Latam fue identificar los instrumentos necesarios para estimular el crecimiento de largo plazo de la región, con base en tres pilares: cómo lograr el fortalecimiento de los cimientos institucionales; cómo fortalecer el marco jurídico; y cómo lograr un papel más relevante en el desarrollo de la región y la innovación tecnológica.
El organismo de investigación y análisis del sector privado señaló que México se encuentra inmerso en el proceso para consolidar cambios importantes en estos temas que le permitan crecer sólidamente en el mediano y largo plazo. Resaltó que la reunión del WEF sin duda fue el foro ideal para que toda la región ponga en la mesa de discusión las propuestas necesarias para concretar los cambios que requieren para su desarrollo.
La participación de empresarios, funcionarios públicos, líderes políticos y sociales en la reunión del WEF, es fundamental para establecer los mecanismos de adaptación a las nuevas condiciones mundiales, añadió.
Estimó que conocer los ajustes y reformas instrumentados para facilitar los negocios, las inversiones, la productividad y la competitividad de la región, puede redundar en un esquema de participación y colaboración conjunta.
En México se ha trabajado intensamente en los temas que se trataron en la reunión del WEF, pues se ha logrado la aprobación de diversas reformas que se espera sean un detonador importante del crecimiento económico y del bienestar de la población. Sin embargo, un aspecto fundamental para consolidar estos temas es un eficiente Estado de derecho, en lo cual seguimos viendo serias deficiencias, consideró el CEESP.
Aseguró que la importancia de lograr avances en este entorno nos llevará a combatir seriamente los problemas de impunidad, corrupción e inseguridad, que son factores que pueden ser determinantes del desempeño de la inversión.
Es claro que las reformas estructurales son indispensables para impulsar el crecimiento, pero éstas no son suficientes, de tal manera que deben complementarse con un ambiente de negocios que estimule los flujos de inversión, acotó.
El organismo apuntó que las reformas energética, de telecomunicaciones, la financiera y la laboral, sin duda contribuyen a allanar el camino para estimular la inversión. No obstante, también es indispensable un marco regulatorio eficiente, en el que los trámites para abrir un negocio sean lo más sencillos posibles, pero especialmente garantizar el estado de derecho que permita ofrecer las condiciones de seguridad para el capital, anotó.
Indicó que contar con finanzas públicas sanas es otro factor fundamental para impulsar el desarrollo de los países, y es por ello que se deben tomar todas las acciones posibles para lograr la mayor eficiencia en las actividades gubernamentales.
No hay que olvidar que un país competitivo debe contar con un gobierno competitivo, que sea capaz de asignar eficientemente sus recursos con el objetivo de evitar situaciones de endeudamiento para poder financiarse, añadió.
Estimó que elevados niveles de deuda sólo reducen los recursos disponibles para que el sector privado pueda financiar nuevos proyectos de inversión, limitando con ello una mayor creación de empleos formales y mejor pagados en el país.