Fallecen 25 personas en descanso de Semana Santa en Guatemala
Ayer viernes murieron tres bañistas en diversas playas de la nación.
Al menos 25 personas fallecieron y alrededor de un centenar resultaron heridas entre el pasado fin de semana y el Viernes Santo en Guatemala, indicaron este sábado fuentes de la policía y de instituciones de socorro.
Las cifras preliminares de la Policía Nacional Civil y de cuerpos de socorro, como los Bomberos Voluntarios y Municipales, sobre los servicios cubiertos durante el feriado, fueron citados por medios de prensa electrónicos.
Sólo el Viernes Santo se reportaron tres personas que perecieron ahogadas en playas del país, de acuerdo con los informes difundidos por emisoras capitalinas.
Se estima que la cifra de víctimas y de percances de tránsito aumentarán con el retorno de los vacacionistas a sus lugares de origen, entre el sábado y el domingo.
Voceros de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) indicaron que el lunes, cuando cierra el programa de prevención y asistencia a la población movilizada, se conocerá el número final de los servicios de emergencia y los percances.
El programa especial de vigilancia y asistencia a la población está a cargo de 10 campamentos y dos centros de monitoreo, instalados en carreteras, playas y zonas turísticas, para prestar atención prehospitalaria y vial, seguridad e información a los viajeros.
En las acciones del programa, que preside la Conred, participa personal de 17 instituciones de los sectores de salud, educación, medio ambiente, turismo, comunicaciones y transportes y seguridad.
En tanto, el Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) informó que entre el Viernes de Dolores (27 de marzo) y el Jueves Santo se habían desplazado a los sitios turísticos alrededor de dos millones de turistas nacionales y más de 100 mil extranjeros.
Según los datos preliminares del Inguat, a la ciudad colonial de Antigua Guatemala, uno de los principales destinos turísticos del país, llegaron unas 500 mil personas.
Esa ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad, ubicada a 45 kilómetros al oeste de la capital, es famosa por la organización de procesiones y alfombras callejeras en Semana Santa que atraen a numerosos visitantes.