Erekat rechaza acusaciones de Netanyahu contra Abbas por ataque en Jerusalén
Un joven palestino arrolló a un grupo de pasajeros, provocando la muerte de una bebé judía y dejando ocho heridos.
El negociador jefe palestino, Saeb Erekat, rechazó este jueves las acusaciones vertidas por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien responsabilizó al presidente de la ANP, Mahmoud Abbas, de haber incitado al ataque en el que ayer miércoles murió una niña judía de tres meses en Jerusalén.
En la que ha sido la primera reacción palestina a los hechos, Erekat rechazó tajantemente las acusaciones y las tildó de "infundadas" e "instigadoras", y subrayó que al primer ministro israelí "no le queda más crédito" en la comunidad internacional.
"Al reclamar imprudentemente que el presidente Abbas incita al terrorismo, Netanyahu ha dado la espalda a la paz", asegura el negociador en un comunicado.
Los hechos ocurrieron ayer miércoles en una carretera que une las dos partes de Jerusalén, cuando un joven palestino al volante de un coche arrolló a un grupo de pasajeros que esperaban o acababan de bajar del tranvía de Jerusalén.
En el ataque, calificado inmediatamente por Israel como "atentado terrorista", murió una niña judía de tres meses y otras ocho personas resultaron heridas, en tanto que el agresor fue abatido por un agente de policía que se encontraba en la zona.
Varios dirigentes israelíes, entre ellos Netanyahu, acusaron a Abbas de haber alentado a éste y otros actos recientes de violencia con declaraciones realizadas la semana pasada sobre la situación en Jerusalén, donde la tensión es máxima en los últimos meses y los enfrentamientos entre ambas comunidades proliferan día tras día. Como en otras ocasiones, Israel también incluyó en la lista de responsables al movimiento islamista Hamás.
Erekat recordó en ese sentido que si la situación en Jerusalén Este es "intolerable", como la describió Netanyahu, es porque "recientes provocaciones de su gobierno han prendido fuego a la situación política".
"(Netanyahu) no mencionó que durante las tres últimas semanas colonos extremistas israelíes financiados por grupos apoyados por el Estado y escoltados por agentes israelíes han tomado 35 viviendas en el barrio (palestino) de Siloé", afirma la nota al recordar una serie de decisiones del Ejecutivo israelí que han elevado la tensión a parámetros sin precedentes en la última década. Entre ellas también recuerda la aprobación de tres mil viviendas en territorio ocupado, o las férreas restricciones a la mezquita de Al Aqsa durante las recientes fiestas judías de Año Nuevo.