Abogado de Assange critica boicot de jueces británicos en una conferencia
Socava la libertad de expresión, asegura el defensor.
El abogado de Julian Assange Michael Ratner criticó este viernes a varios jueces británicos que esta semana se negaron a participar en una conferencia legal en Escocia en la que también daba una charla por videoconferencia el fundador de WikiLeaks.
Ratner subrayó que el boicot de estos jueces de Inglaterra, Escocia y Gales, algunos de los cuales se retiraron cuando ya habían llegado al centro donde se celebraba el acto, "socava la libertad de expresión e información que garantizan tanto la legislación británica como la internacional".
Según los medios británicos, varios destacados jueces del Reino Unido rechazaron participar este miércoles en la Conferencia sobre derecho de la Commonwealth (mancomunidad de excolonias británicas) por no aparecer junto a un "fugitivo de la justicia".
"Se esperaría que los jueces defendieran el derecho a la libertad de expresión, no que pidan censura. Al presionar para que Assange no figurara en una mesa que trataba sobre la vigilancia, se implicaron en un acto de censura", argumentó Ratner, en unas declaraciones que recoge la agencia británica PA.
Ratner señaló que Assange "tiene un derecho absoluto bajo la legislación británica y la internacional a solicitar asilo. Tildar a Assange, a quien se ha concedido asilo, de 'fugitivo de la justicia' deniega su derecho a buscar protección de la persecución".
"El tratamiento excepcional y prejuicioso ofrecido a Assange expone una vez más la dimensión política de este caso", prosiguió el abogado, que recordó que los magistrados "tienen la obligación de mantenerse imparciales" y "evitar descender a la arena política".
Julian Assange, cuyo portal WikiLeaks se especializa en airear las actividades turbias de los Estados, está refugiado desde junio de 2012 en la embajada en Londres de Ecuador, país que le concedió asilo después de que fracasara su batalla legal en el Reino Unido para evitar su extradición a Suecia.
Assange fue detenido en la capital británica en diciembre de 2010 a petición de Suecia, que le reclama para interrogarle por presuntos delitos sexuales cometidos ese año de los que no ha sido acusado y que él niega.
El experto informático, a quien la policía británica vigila las 24 horas pues no tiene autorización para abandonar el Reino Unido, teme que si es entregado a Suecia este país pueda extraditarle a Estados Unidos, donde podría afrontar la pena de muerte por las actividades de su portal.
Tras un largo periodo de estancamiento legal, que Assange ha pasado encerrado en la pequeña legación diplomática, la Fiscalía sueca ha aceptado ahora interrogarle en la embajada para evitar que prescriban algunos de los presuntos delitos que se le atribuyen.