Alertan autoridades por extorsiones telefónicas en Cancún
La Procuraduría General de Justicia de Quintana Roo llamó a la ciudadanía a no dejarse engañar y denunciar de inmediato cuando reciba llamadas telefónicas solicitando el apoyo de un botiquín o medicamentos de primeros auxilios para un herido.
En un comunicado, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) advirtió que la nueva modalidad de las extorsiones telefónicas la realizan personas que dicen pertenecer al grupo delictivo de los “zetas”.
La dependencia hizo un llamado a la población a “mantenerse alerta” y no caer en ese tipo de extorsión telefónica, suspender la comunicación y reportarlo para que agentes de la Policía Judicial, investiguen el origen de ese tipo de comunicaciones.
La semana pasada, personal de guardia de la policía judicial recibió seis reportes de negocios, como restaurantes, laboratorios, casa de empeños y tiendas de autoservicio, que sufrieron intimidaciones vía telefónica, reportó.
En dos casos, continuó, si lograron depositar a números de cuentas en las tiendas de conveniencia la cantidad de cinco mil pesos cada uno.
Mencionó el caso de un restaurante ubicado en la avenida Nichupté, supermanazana 19, donde la cajera recibió una llamada mediante la cual le preguntaban si tenía gasas, agua oxigenada, alcohol y cubre bocas, pues “tenían una persona enferma”.
Además, le pidieron que tomara todo el dinero que hubiera en la caja y lo depositara en la cuenta 47 66 84 01 58 89 26 90; sin embargo, la empleada sólo depositó cinco mil pesos y reportó el hecho a sus superiores.
El otro caso, de extorsión telefónica, fue a una casa de empeño, ubicada en región 91 por avenida José López Portillo, donde la gerente indicó que recibió una llamada de una persona que se identificó como el licenciado Navarrete, quien le dijo que era del grupo de los “zetas”.
Añadió que el hombre en el auricular le pidió que lo apoyara, pues estaba afuera del negocio, a bordo de una camioneta con una persona herida, por lo que le pedía que le mandara un botiquín con medicamentos.
La voz de hombre, le dijo que cuánto dinero había en la bóveda, a lo que ella, respondió que no sabía, porque no estaba autorizada para abrirla.
Sin embargo, dijo que esa persona le dijo que tomara el dinero de había en la caja, siendo cinco mil pesos y que los depositara en la cuenta 01 98 75 73 13 a nombre de José Francisco Racho Jacome, por lo que la empleada salió a realizar dicha acción.
Al regresar, la mujer presionó el botón de pánico y en el camino, otro empleado la interceptó y logró evitar que depositara 60 mil pesos que había en la bóveda, pues en otras sucursales ya habían recibido este tipo de llamadas, pero no cayeron y no depositaron.
La PGJE especificó que en los otros cuatro casos similares no se concretó el depósito del efectivo solicitado, pues el personal estaba alerta y de inmediato colgaron la llamada, para luego denunciar el hecho a la autoridad competente.