Publican libro para identificar y solucionar bullying
Contiene textos de investigadores de Colima, BC, Tlaxcala, DF y del estado de México.
El especialista Francisco Pedroza Cabrera publicó el libro “La construcción de identidades agresoras: el acoso escolar en México” para identificar y solucionar el bullying; a lo largo de 13 capítulos y 276 páginas reúne textos de investigadores de diferentes partes del país, como Baja California, Tlaxcala, Distrito Federal, Colima y Estado de México, para tener una visión integral de lo que es el bullying en México.
En los primeros apartados, dijo el especialista, se hace una conceptualización de lo que es este fenómeno para que quede claro a todos, luego se analizan los roles de víctimas y agresores, así como las diferentes categorías de bullying.
Posteriormente se identifican algunas variables asociadas con este fenómeno y, finalmente, se presentan programas de prevención e intervención que ya han sido aplicados con éxito, anotó.
El especialista urgió a tratar este problema, pues puede repercutir en la vida posterior tanto de los agredidos como de los agresores: los segundos pueden desarrollar comportamientos antisociales como consumo de drogas y actos delictivos, mientras que los primeros pueden sufrir estrés que afecte sus relaciones futuras.
Explicó que la agresión focalizada a una persona o grupo de ellas, por un determinante físico o social, y que se mantiene durante el tiempo, son las características principales que definen al bullying, a diferencia de una agresión común.
El coordinador del libro “La construcción de identidades agresoras: el acoso escolar en México”, junto con San Juana Aguilera, señaló que no se ha entendido bien qué es ese fenómeno, pues cualquier agresión es tomada por padres y autoridades escolares como bullying.
Sin embargo, recordó que el acoso en los colegios no es un fenómeno nuevo, ha ocurrido por mucho tiempo, pero “cuando los fenómenos se nos salen de las manos, por así decirlo, cuando empezamos a ver que se empiezan a exacerbar las consecuencias, que empieza a incrementarse en cantidad o en frecuencia, es cuando ponemos más atención”.
Pedroza Cabrera, doctor en Psicología por la Universidad Autónoma de Aguascalientes, especialista en procesos de interacción social y niños agresivos, dijo que el bullying tiene características definidas: es una agresión focalizada a “una o dos víctimas o un grupo de agresores tiene grupos de víctimas específicos”.
Además, continuó, “el agresor tiene un poder sobre la víctima, por una característica personal, física, social; personas que son aisladas, que tienen algo que las haga diferentes, sobre las cuales el agresor tiene cierto poder”.
Subrayó que no todas las agresiones tienen que tomarse por dicho fenómeno, porque en general hay niños que se portan bien, pero se pueden volver agresivos en ciertos contextos sin llegar a molestar a una persona en particular.