De guerras y espiritualidad en Cannes
La guerra, fértil abono para el cine desde su nacimiento, ha engendrado grandes obras maestras en su vertiente dramática, pero también buen número de comedias negras entre las que se inscribe "Un día perfecto", de Fernando León de Aranoa, recibida en Cannes con risas y aplausos.
El único largometraje español en el festival de este año, presentado en la sección paralela de La Quincena de Realizadores, arroja una mirada amable hacia la labor de los cooperantes y feroz hacia la inoperancia de las agencias internacionales.
Por otra parte, los primeros abucheos del 68 Festival de Cannes se los llevó "The sea of trees", la espiritual propuesta de Gus Van Sant que no ha convencido ni siquiera por tener a Matthew McConaughey y Naomi Watts como protagonistas, algo que no pareció importar al realizador estadounidense.
"Cuando presenté 'Elephant', en 2003 y ganó la Palma de Oro, hubo peleas tras la proyección sobre si era buena o mala. Algunas personas se pegaron y eso era en Cannes", afirmó el director en rueda de prensa sobre el mal recibimiento a su nuevo trabajo.