Festejo en Colombia causa tragedia

AP Medellín 22-05-2014 14:01

El Nacional se coronó en la Liga Colombiana y a causa de eso ha habido muertes y lesiones en los festejos.

Dos muertos, decenas de heridos y pérdidas millonarias fue el resultado de los incidentes posteriores a la consagración de Atlético de Medellín como campeón del torneo Apertura del fútbol colombiano, según la estimación preliminar de las autoridades.

En el partido decisivo, Nacional venció a Atlético Junior de Barranquilla por 4-2 en definición por penales. Nacional forzó esa instancia al vencer por 2-1 en tiempo de descuento, para igualar la serie 2-2 ya que Junior había ganado 1-0 el partido de ida.

El equipo verde igualó el miércoles por la noche a Millonarios de Bogotá, el primero en sumar 14 coronas en el balompié local. Nacional además sumó su tercer gallardete en línea mientras Junior falló en el intento de lograr el octavo.

Los choques más graves se registraron en Barranquilla, en el Caribe, sede del Junior, donde hubo un muerto y una docena de heridos en riñas callejeras, confirmó el comandante de la policía, brigadier general José Vicente Segura.

El general Segura anunció el fallecimiento de un joven de 17 años de edad sin identificar, quien recibió un disparo en la cabeza en una de las muchas refriegas.

Seis agentes quedaron heridos, uno de ellos alcanzado en una mano por una bala y otro padeció un trauma cranoencefálico severo.

Las autoridades trataban de establecer el jueves si la muerte violeta de otras cuatro personas se produjo en los disturbios promovidos por fanáticos frustrados o en hechos aislados.

Los héroes fueron el arquero argentino Franco Armani, quien atajó dos disparos y convirtió uno, y John Valoy, autor de la diana en la última acción, cuando Junior con el 1-1 se alistaba a festejar.

El carnaval en Medellín seguía el jueves mientras Cristian Camilo Ramírez, de 20 años de edad, falleció a consecuencias de heridas con arma blanca, indicó la policía.

El vicealcalde de la ciudad Luis Fernando Suárez confirmó la retención de cerca de medio centenar de revoltosos, incluyendo una veintena de menores de edad, y la muerte de Ramírez.

Pereira, en el Eje Cafetero, registró más de 130 riñas cuando seguidores de Nacional celebraban, con saldo de nueve heridos, uno de ellos grave, y daños en almacenes, autos y residencias, según el coronel Ricardo Alarcón, comandante de la policía de la ciudad.

Montería, en el norte de Colombia, igualmente fue teatro de enfrentamientos entre fanáticos frustrados por la derrota de Junior, el onceno "Tiburón".