Los miembros de cuatro patas de la familia, llámense perros o gatos, no son inmunes a los peligros que acechan a sus mejores amigos, los humanos, y más allá de las molestas y recurrentes pulgas y garrapatas que en ocasiones los aquejan, hay insectos y otros animales que pueden resultar un verdadero peligro para ellos.
Además de su buen baño, cepillado e inspección recurrente para detectar posibles picaduras de algún insecto, es necesario tomar medidas para evitar al máximo que nuestros perros sean víctimas de arañas, alacranes y hasta sapos que podrían suponer un peligro para su salud.
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¿Qué insectos y animales son peligrosos para mi “Firulais”?
En el 2019, investigadores de ciencias veterinarias de la Universidad Nacional de la Plata, Argentina, realizaron un listado con las especies más peligrosas que podrían estar presentes en nuestro hogar y ser un riesgo para la salud de perros y gatos, en el que incluyeron algunas plantas, pero también arañas, alacranes, serpientes y hasta sapos.
- La nota: Toma en cuenta que un felino siempre correrá menos riesgo de intoxicarse, pues son más selectivos al momento de elegir algún elemento para jugar o lamer. Los perros son distintos: muerden y tragan de manera más insistente casi todo.
Las intoxicaciones en nuestros amigos de cuatro patas, trufa húmeda y rabo juguetón se dan principalmente en su etapa de cachorro, que es donde más curiosos son y agarran de todo, por lo que, de acuerdo a la región donde vivas, debes tener cuidado con las siguientes especies:
Arañas
Las arañas son las más temidas cuando de especies potencialmente tóxicas se trata.
Aunque últimamente se ha hablado del peligro que representan las arañas violinistas y la viuda negra, la verdad, destacan los investigadores de la Universidad Nacional de la Plata, es que no son organismos agresivos.
Las arañas sólo son agresivas cuando son molestadas, ya sea a propósito o por accidente, por lo que la recomendación es mantener sumamente limpia la zona en donde nuestros “Firulais”, “Milanesos” y “Solobinos” vivan, ya sea al interior o exterior del hogar.
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En general, si mantienes limpia la zona donde viven tus mejores amigos, las arañas no serán un problema para ellos aunque, claro, se enfrentarán a algunas que les dejarán una que otra marca rojiza en su piel.
Si la mordedura de una araña llegara a ser tóxica, lo cual no es común, tu can podría presentar los siguientes síntomas, por los que tendrías que acudir rápidamente al veterinario
- Nerviosismo
- Descoordinación
- Parálisis
- Problemas para respirar
- Vómitos y diarrea
Si sospechas que hay huequitos donde insectos de patas múltiples y quelíceros afilados podrían esconderse, una solución es fumigar constantemente.
Escorpiones y alacranes
En el caso de los alacranes, los cuales viven principalmente en zonas áridas y con altas temperaturas, una picadura a nuestro lomito podría ser mortal, ya que hay especies venenosas.
Con los escorpiones es distinto, ya que, además de que es sumamente raro encontrarse con alguno, sólo unos pocos son peligrosos, como los del género Tityus, cuya picadura puede provocar dolor intenso y manifestaciones sistemáticas.
Según el sitio especializado Experto Animal, entre los síntomas que un can con picadura de alacrán puede presentar se encuentran los siguientes:
- Lagrimeo
- Hipersalivación
- Temblores musculares
- Problemas al respirar
- Vómito
- Dolor, que el perrito expresará con gemidos
- Convulsiones
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Si un alacrán picó a tu perrito, la recomendación es llevarlo al veterinario, tratar de ubicar a la especie que le clavó el aguijón y explicar al experto su color y apariencia general para que éste pueda suministrar un tratamiento específico.
En esta liga de la UNAM puedes checar el aspecto de los alacranes potencialmente tóxicos en México.
Serpientes
En un texto de UNAM Global se lee que en México los envenenamientos más frecuentes por mordedura de serpientes están relacionados con la “terciopelo” (género Bothrops), la cual vive en estados del sur.
“El veneno de estas serpientes es una mezcla compleja de sustancias capaces de provocar gran daño local, caracterizado por hinchazón, hemorragia y necrosis (muerte de tejidos), aunque también son posibles los daños sistémicos (distantes al sitio de la mordedura), como sangrado, daño muscular, renal, entre otros”
UNAM Global.
- Ojo: Si eres de los que pasea con su mejor amigo por zonas boscosas, áridas o simplemente sendereas con él o ella, debes estar siempre atento a que la trufa no lo guie a algún recoveco, posible hogar de una víbora. Recuerda que la mayoría de estos reptiles evitan el contacto con otras especies.
El sitio Animal’s Health detalla que entre los signos de alerta que presenta un can mordido por una serpiente se encuentran los siguientes:
- Heridas punzantes que supuran sangre o suero (revisa siempre bien a tu mejor amigo después de un paseo por la naturaleza).
- Dolor (gemidos) e hinchazón repentina en alguna zona de la piel en donde la mordedura será evidente.
- Aumento de salivación y diarrea.
- La recomendación es calmar al perro para evitar que la toxina se propague rápidamente y llevarlo al veterinario más cercano.
- NO succiones o cortes el sitio de la mordedura y si tienes un celular busca qué tipos de serpientes viven en la zona para guiar al veterinario en el posible tratamiento.
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Ojo con las abejas
Las abejas y avispas causarán curiosidad en tu amigo de cuatro patas, por lo que un encuentro, amistoso para el can, alarmante para el insecto, podría terminar con una o varias picaduras.
Lejos de lo que pudiera pensarse, el sitio Hillspet detalla que una picadura de abeja o avispa sólo causará dolor a los de trufa húmeda y quizá un poco de hinchazón. No obstante, hay que acudir al veterinario.
- Ojo: La cosa cambia si al “Firulais” lo pican más de una vez o si el piquete se registra en la boca o garganta, debido a la hinchazón que genera, la cual puede obstruir o bloquear las vías respiratorias.
Hay perros que son alérgicos a las picaduras de abeja. Entre los síntomas que muestran se encuentran los siguientes:
- Además de la evidente hinchazón, debilidad general.
- Dificultad para respirar.
La recomendación: Acude siempre al veterinario y ten a la mano un teléfono de emergencia de una clínica que pueda atender al “Milaneso” las 24 horas del día.
No se vale chupar ni morder a un sapo
Si vives en una zona donde los sapos son cosa común, aguas, lo mejor es que tu perro siempre ande con correa.
Los investigadores de la Universidad Nacional de la Plata, Argentina, detallan en su listado sobre especies peligrosas que los sapos pueden hacer pasar un mal rato a los de rabo juguetón.
Hay que recordar que la mayoría de anfibios son venenosos, aunque, en realidad, pocos pueden afectar la salud de humanos y canes.
En el caso de los sapos, algunas especies poseen glándulas que producen sustancias tóxicas capaces de provocar gran irritación en la lengua y boca de quien ose chuparlos.
El daño puede ir más allá, pues puede afectar los signos cardiacos y nerviosos, por lo que si tu mascota se ve atraído por el croar de una de estas especies, lo mejor es dar media vuelta y hacer caso omiso a sus deseos de hacer nuevos amigos.
- Nota: Si “Firulais” se te escapó y le dio una buena lamida o, en el peor de los casos, mordida al sapo, lávale rápidamente la boca con agua abundante, de preferencia con una manguera, y acude rápidamente al veterinario.