Al menos cinco personas murieron en un terremoto de 7.0 grados de magnitud que sacudió este miércoles el norte de Filipinas, pero que se sintió hasta la capital Manila, a más de 300 km del epicentro.
El sismo tuvo su epicentro en la provincia montañosa de Abra, en la isla principal de Luzón, a las 08:43 horas locales, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
Sismo deja al menos 5 muertos y varios heridos
Dos trabajadores de la construcción murieron en la provincia de Benguet y una mujer de 23 años falleció aplastada cuando se cayó un muro en el municipio de Bangued, situado en la provincia de Abra, donde se notificaron al menos 78 heridos.
Otra persona perdió la vida al precipitarse de una obra en la región de Kalinga. Otros seis trabajadores resultaron malheridos.
Las fuerzas del orden informaron que una anciana en el municipio de Suyo, en la provincia de Ilocos Sur, pereció después de que un desplazamiento de tierra la sepultara mientras caminaba.
En Dolores, que sintió la fuerza total del movimiento telúrico, personas aterrorizadas salieron corriendo de sus edificios y los ventanales de un supermercado se quebraron.
“El sismo fue muy fuerte”, comentó el policía Edwin Sergio, quien agregó que se hicieron pequeñas grietas en la sede de la estación policial.
Un video subido en redes sociales muestra hendijas en una calle de asfalto y el suelo en la localidad de Bangued, cerca del epicentro, aunque no se observaron daños en casas o tiendas.
Pero varias personas heridas en Bangued fueron llevadas al hospital, dijo el jefe policial Nazareno Emia.
“Algunos de los edificios tienen grietas. Hubo un apagón y la internet se cayó también”, agregó.
A su vez, el congresista Ching Bernos, del distrito Lone, de Abra, indicó que el terremoto “causó daños en muchas casas y establecimientos”, aunque no dio detalles.
Filipinas suele ser sacudido por sismos debido a su ubicación en el “Anillo de Fuego” del Pacífico, un arco de intensa actividad sísmica que se extiende de Japón al sureste asiático y la cuenca del Pacífico.