“No elijan la extinción” es el título de un video compartido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para concientizar a la población sobre el cambio climático.
“Al menos nosotros teníamos un asteroide, ¿cuál es su excusa? No elijan la extinción, salven a su especie antes de que sea demasiado tarde”.
Dice el dinosaurio en el video de la ONU.
En las imágenes, se puede ver a Frankie, nombre con el que se identifica el dinosaurio, afirmando que es absurdo el pagar por nuestra propia desaparición.
“Con Frankie el dinosaurio, es posible que salgamos con algo un poco diferente, un poco atractivo y con un gran mensaje, que es un mensaje de esperanza, ya sabes, hay una crisis, tenemos que actuar y tenemos las soluciones, sabemos qué hacer y podemos hacerlo”, destacó la directora de Comunicaciones del programa durante la presentación de la campaña contra el cambio climático.
De acuerdo con la ONU, el video sobre cambio climático está traducido en 35 idiomas y la versión en español cuenta con el doblaje de la actriz mexicana Eiza González.
La crisis mundial por el cambio climático
Ante los temores de un naufragio de la cumbre sobre clima COP26, que comienza el domingo en Glasgow, se multiplican los llamamientos a los dirigentes mundiales para tomar medidas más fuertes y más rápidas para frenar el calentamiento de un planeta que ya es víctima de catástrofes en serie.
Siberia y California, arrasadas por las llamas; inundaciones espectaculares en Alemania y en Bélgica, y una impresionante ola de calor en Canadá. La temperatura en la Tierra ha aumentado cerca de +1.1 °C desde la era preindustrial y los seres humanos viven las consecuencias dramáticas del cambio climático que han provocado. Y sólo se trata del inicio, advierten los científicos, subrayando que cada fracción de grado adicional traerá su lote de nuevos desastres.
Frente al futuro apocalíptico que predice el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU, la solución es clara: reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 45% para 2030 con el fin de limitar el calentamiento a +1.5 °C, el objetivo más ambicioso del Acuerdo de París, y continuar por esa senda hasta alcanzar la neutralidad carbono hacia 2050.
