Kamala Harris, la vicepresidenta electa de Estados Unidos, luego de que Joe Biden se declarara ganador de las elecciones presidenciales del pasado 3 de noviembre, se hizo presente de inmediato en Twitter y reveló qué es lo primero que hará ahora que confirmaron su triunfo.
“Esta elección es mucho más que Joe Biden o yo. Se trata del alma de Estados Unidos y nuestra voluntad de luchar por ella. Tenemos mucho trabajo por delante. Empecemos”.
¿Quién es Kamala Harris?
Nació el 20 de octubre de 1964 en Oakland, California. Harris creció en Oakland, en la California progresista de los años 1960, orgullosa de la lucha por los derechos civiles de sus padres: un jamaiquino profesor de economía y una india tamil, actualmente fallecida, investigadora del cáncer de mama.
Estudió en la Universidad de Howard, fundada en Washington para acoger a estudiantes afroestadounidenses segregados, y recuerda regularmente su membresía en la asociación de estudiantes negros Alpha Kappa Alpha.
Casada desde agosto de 2014 con Douglas Emhoff, abogado y padre de dos hijos, Kamala Harris pone a su familia primero: había elegido a su hermana Maya para liderar su fallida candidatura a las primarias.
Siempre ha sido pionera
Hija de inmigrantes de Jamaica e India, Harris ha sido una pionera política desde los comienzos de su carrera.
Recuerda que a su madre le gustaba decirle: “Podrías ser la primera en lograr muchas cosas, pero asegúrate de no ser la última”.
Harris fue la primera fiscal general negra de California y la primera mujer en ocupar ese puesto. Y fue la primera con ascendencia india en llegar al Senado. Ahora será la primera vicepresidenta.
Su camino a la vicepresidencia
Harris conoce bien al candidato demócrata a la Casa Blanca, a quien a veces simplemente llama “Joe” en público, porque era cercana a su hijo Beau, quien murió de cáncer en 2015.
Pero como precandidata presidencial demócrata, sorprendió al atacar con virulencia a Biden durante el primer debate del partido, en 2019, cuestionando sus posiciones sobre políticas para acabar con la segregación racial en la década de 1970.
Entonces, Harris contó conmovida, cómo, cuando era niña, viajaba en uno de los autobuses que llevaban a escolares negros a barrios blancos. El agrio intercambio con el exvidepresidente de Barack Obama la hizo disparar en las encuestas.
Pero a pesar de un inicio de campaña con bombos y platillos frente a más de 20 mil personas, rápidamente bajó en los sondeos, sin lograr definir claramente su candidatura. Tras finalmente abandonar las primarias antes de las primeras votaciones en febrero, Harris anunció su respaldo a Biden en marzo.
Algunos aliados del exvicepresidente de Barack Obama no le perdonaban no haberse retractado lo suficiente de sus críticas y advertían contra una compañera de fórmula demasiado “ambiciosa”, una apreciación considerada sexista por los partidarios de Harris.
Pero su experiencia en los poderes legislativo, judicial y ejecutivo y una personalidad que mezcla risa contagiosa y dureza como exfiscal, finalmente venció esos temores.