¿Conoces la historia del pay de limón? Aquí te la contamos y te decimos cómo prepararlo fácil y rápido
El pay de limón es un clásico que ha conquistado paladares en todo el mundo, y su historia es tan interesante como su sabor.
- ¿Te gustaría conocerla? En Unotv.com te la vamos a contar.
Historia del pay de limón
Sus orígenes son un poco inciertos, pero se cree que sus raíces se encuentran en Inglaterra, donde se pudo haber preparado cerca del siglo XVIII; en esa época, los protestantes utilizaban mucho las yemas de huevo en otras preparaciones.
Para no desperdiciar las claras, comenzaron a experimentar con ellas. Así nació la idea de crear un relleno cremoso y ácido con base de limón para acompañar una masa quebrada.
La receta cruzó el Atlántico y llegó a América del Norte pocos años después, con la colonización, donde se popularizó rápidamente.
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- En Estados Unidos, el pay de limón se convirtió en un postre icónico, especialmente en la cocina casera.
Algunas teorías sobre su evolución dicen que la adición del merengue fue una innovación posterior, que le dio un toque aún más sofisticado y aireado. Con el tiempo, este postre se adaptó a los gustos locales y surgieron diversas versiones, con diferentes tipos de corteza, rellenos y adiciones.
Se trata de una receta muy especial, pues la acidez del limón contrasta perfectamente con la dulzura del azúcar y la cremosidad de las yemas de huevo; además, se puede disfrutar tanto frío como caliente, y se adapta a diferentes ocasiones.
- A pesar de su sabor sofisticado, tiene tantas versiones que algunas son muy fáciles de hacer.
Receta del pay de limón frío en vaso
Esta opción es perfecta para quienes buscan un postre rápido y fácil, además de ser ideal para presentar en porciones individuales.
Ingredientes:
- Galletas de chocolate trituradas
- Mantequilla derretida
- Leche condensada
- Jugo de limón
- Ralladura de limón
- Crema para batir
- Azúcar glass
Preparación:
Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta formar una masa homogénea. Reparte esta mezcla en el fondo de vasos individuales y presiona para formar una base compacta.
En un recipiente, mezcla la leche condensada, el jugo de limón y la ralladura de limón; por otra parte, bate la crema para batir con el azúcar glass hasta obtener picos suaves. Incorpora la mezcla de leche condensada y limón a la crema batida con movimientos envolventes a la crema.
Vierte la mezcla sobre la base de galletas en los vasos. Puedes decorar con un poco de ralladura de limón o una hojita de menta. Refrigera durante al menos dos horas antes de servir.
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