En la zona más alta del volcán Citlaltépetl, también conocido como el Pico de Orizaba, ubicado a 4 mil 300 metros de altura sobre el nivel del mar, llegó el párroco del templo de San Juan Bautista, quien iba con un grupo de feligreses para celebrar, por primera vez, una misa en las instalaciones del albergue de la cima más alta de México.
“A 4 mil y tantos metros sobre el nivel del mar, estamos en esta hermosísima experiencia en el volcán Citlaltépetl, ofreciendo nuestra alegría en esta aventura como una ofrenda, un reconocimiento a la presencia maravillosa de Dios”
Fernando Seynos, párroco de San Juan Atenco
Alpinistas y pobladores salieron de las faldas del Pico de Orizaba hasta llegar al albergue y la zona de Valle del Encuentro. Ahí, ni las inclemencias del clima, como las bajas temperaturas y la neblina, fueron impedimento para que los presentes mostraran su fe y agradecimiento.
- La celebración eucarística en el volcán Citlaltépetl fue en honor del Beato Juan de Palafox y Mendoza.
En la misa que se celebró en lo alto del Pico de Orizaba las oraciones se elevaron por la salud de los enfermos que contrajeron el nuevo coronavirus COVID-19, el bienestar de los pobladores de la región, la seguridad en la zona y la integridad de los alpinistas que escalan esta cumbre, la más alta de México.
“En medio de esta situación tan difícil, de esta pandemia, tenemos un México tan hermoso que Dios nos ha dado”
Fernando Seynos, párroco de San Juan Atenco
Fueron 80 participantes en la misa en el volcán Citlaltépetl que viajaron durante casi seis horas a pie, por lo que el descenso ocurrió la madrugada de este jueves.