Como consecuencia del paso del huracán Otis por Acapulco y zonas aledañas, se incrementó el riesgo de adquirir enfermedades transmitidas por moscos, entre ellas el dengue. Esta situación hace indispensable realizar acciones que ayuden a controlar la propagación de los mosquitos y evitar potenciales brotes.
En estos días, con el apoyo de Fundación Inbursa, se llevarán a cabo fumigaciones aéreas, como complemento de las acciones que ya se están realizando. Las fumigaciones se realizan con productos seguros y no representan peligro alguno para la salud de la población.
También es muy importante la participación de la comunidad, lavando, tapando, volteando y tirando todos aquellos recipientes que no se utilicen y que pueden servir como criadero del mosco. Con estas medidas, el control será más efectivo.