Cientos de migrantes duermen en las calles de Tapachula, Chiapas afuera de las instalaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados para hacer fila y obtener una solicitud de asilo en México.
Por segundo día consecutivo las oficinas lucieron saturadas, tras la estampida que dejó 10 lesionados por lo que la Guardia Nacional redobló la seguridad.
Los migrantes piden a las autoridades rapidez y organización para atender las solicitudes.
“Yo llevo seis días, llevo cuatro días aquí, ya y no me he movido porque las filas se rompen, el gobierno de Tapachula con la migración es para que dieran tickets para que no se pierda la fila. Yo te doy ticket para que te organice porque por cola la gente mañana se riega y se vuelve a regar, hay que quedarse a dormir aquí, mañana es el relajo otra vez”. Adrián Piedra, migrante cubano
Este martes los migrantes hicieron dos filas, una de haitianos y otra para el resto de nacionalidades; sin embargo, los haitianos no han respetado las órdenes.
Quienes están ahí desde hace días, piden ayuda, pues muchos están sin comer, bajo el sol y sin dormir.
“Porque nosotros, nos quedamos en la calle, sufrimos por agua, sufrimos del sol, comida, a veces de la caridad vivimos porque por no tener papeles, no nos dan un trabajo y hay personas sí de buen corazón que nos ayuda, pues no tenemos nosotros un apoyo o alguien, una organización humanitaria que nos pudieran echar la mano”. Silvia Flores, migrante
Las autoridades pusieron vallas metálicas en la entrada para evitar que los migrantes se acerquen al portón que derribaron el lunes.
Se estima que actualmente más de 6 mil migrantes llegan diariamente a las oficinas de la COMAR en busca de documentos.
Sin embargo, activistas señalan que podría haber más de 100 mil migrantes en diferentes municipios de Chiapas en busca de salir rumbo al norte del país e intentar alcanzar el llamado “sueño americano”.