Registra Texas su segunda muerte por brote de sarampión
El jueves, Texas registró su segunda víctima mortal de sarampión, informaron este domingo las autoridades estatales, tratándose de una niña de 8 años, en medio del brote de la enfermedad infantil que lleva casi 500 casos en la entidad y se ha extendido por 22 estados.
Asimismo, el Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas destacó que la menor no estaba vacunada, pero tampoco padecía alguna enfermedad subyacente, muriendo en un hospital a causa de un fallo pulmonar provocado por el sarampión.
“La niña estaba recibiendo tratamiento para las complicaciones del sarampión mientras estaba hospitalizada”, dijo Aaron Davis, vocero del Sistema de Salud UMC en Lubbock, Texas, en un correo electrónico.
¿Qué pasa con el sarampión en Estados Unidos?
Se trata de la segunda muerte de un niño en Texas desde que comenzó el brote de sarampión a finales de enero, luego de que a finales de febrero se presentó un deceso en la ciudad de Lubbock, al noroeste de Texas, una comunidad tradicionalmente con baja vacunación.
Al respecto, el Secretario de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Estados Unidos, Robert F. Kennedy Jr., identificó en una publicación en la red social X a la niña como Daisy Hildebrand, de 8 años.
Kennedy, que ha sido un activista antivacunas y anteriormente ha dicho que la vacunación es una elección personal, dijo el domingo que las vacunas son la mejor protección contra el sarampión.
“La forma más eficaz de prevenir la propagación del sarampión es la vacuna triple vírica”, dijo a través de un tuit, a la par de acotar que hasta el domingo había 642 casos confirmados de sarampión, 499 de ellos en Texas.
Agregó que visitó Texas para consolar a la familia Hildebrand tras la muerte de su hija, donde conoció a la familia de la primera niña de Texas fallecida en el brote de sarampión, Kayley Fehr, “después de que murió en febrero”.
Kennedy dijo que los equipos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han sido trasladados a Texas a petición del gobernador del estado, Greg Abbott.
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Kennedy ya había recomendado anteriormente la vitamina A como tratamiento contra el sarampión, a la par de una buena nutrición. Aunque en algunos estudios realizados en países en desarrollo se ha demostrado que la vitamina A disminuye la gravedad de los síntomas, en cantidades elevadas puede provocar toxicidad hepática.
La publicación de Kennedy sobre las vacunas se produjo después de que el senador republicano estadounidense, Bill Cassidy, que también es médico y presidente del comité de salud del Senado, escribió en X tras conocerse la muerte de la niña: “Todo el mundo debería vacunarse”.
“Los máximos responsables sanitarios deberían decirlo inequívocamente antes de que muera otro niño”, escribió Cassidy en X, luego de que había apoyado la confirmación de Kennedy después de que éste prometió no introducir cambios en la supervisión de las vacunas.
La vacuna contra el sarampión tiene una eficacia del 97% tras dos inyecciones.
En tanto que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) afirman en su página web que la vacuna es “la mejor protección contra el sarampión”, que se propaga por el aire cuando una persona infectada estornuda o tose.
