La Fiscalía española retiró el viernes todas sus acusaciones contra Neymar y el resto de señalados en el juicio por las supuestas irregularidades cometidas en el traspaso del astro brasileño al FC Barcelona en 2013. Las autoridades pedían inicialmente dos años de prisión y una multa de 10 millones de euros contra el brasileño por corrupción en los negocios.
El Ministerio Público “decidió retirar la acusación respecto a todos los acusados y por todos los hechos”, indicó este viernes el fiscal Luis García en sus conclusiones en la Audiencia de Barcelona.
El caso contra Neymar había sido presentado por la firma de inversión brasileña DIS, que poseía el 40% de los derechos del jugador cuando estaba en el Santos. La demanda fue aceptada por la Fiscalía por estafa y corrupción en 2015.
Pero la compañía no ha conseguido sustentar sus acusaciones durante las vistas, a ojos de la Fiscalía, que consideró que estas no estaban basadas en pruebas, “ni siquiera indiciarias”, sino en “presunciones”.
“Creo que DIS tiene perfecto derecho a entender que el traspaso de Neymar le tuvo que suponer un mayor beneficio, pero creo que ha errado en la jurisdicción”, expuso García, que indicó que se trataba más de un caso civil que penal.
El fiscal contradice así la visión de sus colegas de Madrid, donde arrancó la andadura de este caso complejo y lleno de turbulencias, que tras muchas disputas entre las partes acabó siendo enviado a Barcelona.
Pese a que el viraje del Ministerio Público no determina necesariamente el desenlace del juicio, que termina el lunes, sí que debilita la acusación, ahora solo en manos de DIS.
Neymar durante el juicio
Además de Neymar y sus padres, los expresidentes del Barça Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, así como un exdirigente del Santos, Odilio Rodrigues Filho, también están siendo juzgados en este proceso.
Los otros acusados son tres entidades jurídicas: el FC Barcelona, el Santos FC y la empresa fundada por los padres del jugador para gestionar su carrera.
Durante el juicio oral, que trajo a Neymar de vuelta a Barcelona a un mes del Mundial de Qatar, la estrella brasileña declaró que solo firmaba los documentos que le indicaba su padre, y este no hizo nada ilegal.
“Yo firmo lo que él me dice”, explicó sereno el delantero del París Saint-Germain la semana pasada ante el tribunal, antes de ser autorizado a regresar a Francia para reintegrarse a su equipo.
En la sala, Neymar aseguró no recordar si participó en las negociaciones con el Barça en 2011, uno de los puntos centrales del caso.
¿En consiste las acusaciones contra el futbolista brasileño?
Pese a que el Barça cifró inicialmente el fichaje de Neymar en 57,1 millones de euros (40 millones para su familia y 17,1 para el Santos), la justicia española estimó que alcanzó al menos los 83 millones.
Pero, para DIS, el club catalán, Neymar y más tarde el Santos se aliaron para ocultar el monto real de la operación a través de otros contratos de los que ellos quedaron fuera.
La compañía recibió 6,8 millones de los 17,1 ingresados oficialmente al club brasileño, por lo que ahora reclaman los 35 que estiman haber perdido.