Aremi Fuentes conquistó la medalla de bronce en levantamiento de pesas el pasado 1 de agosto en Tokio 2020. Y después de varios días lejos del país, la mexicana está de vuelta y habla de la estrategia que utilizó para subir al podio olímpico, así como sus planes a futuro.
Para la pesista, vivir los últimos minutos fue parte de la estrategia que puso en marcha para buscar subir al podio.
“Si quería una medalla tenía que levantar más, estudiamos a todas las rivales y todas las posibilidades que teníamos”, dijo Aremi Fuentes a su llegada al Aeropuerto de la CDMX.
La mexicana también dijo que está lista para seguir entrenando con vistas a la clasificación de Paris 2024.
Fuentes se convirtió en la cuarta mexicana en colgarse un medalla después de Soraya Jiménez en Sydney 2000 (oro), Damaris Aguirre en Beijing 2008 y Luz Mercedes Acosta en Londres 2012 (bronce).
La mexicana terminó en el tercer sitio en la justa veraniega tras alzar 108 kilos en arranque, 137 en envión para totalizar 245 kilos.
La medalla de oro fue para la ecuatoriana Neisi Dajomes con 118, 145 para terminar con 263, seguida de la estadounidense Katherine Nye con 111, 138 para concluir con 249.
“Me siento contenta por este recibimiento, por las muestras de cariño, es muy bonito y grato estar en mi país”.
Aremi Fuentes, atleta
El momento que no olvida Aremi Fuentes durante la competencia
Aremi Fuentes agregó que un momento que la dejó marcada ocurrió durante su primer levantamiento:
“Algo que me quedó marcado es cuando salí en el primer levantamiento no lo hice bien, dudé de mí misma, me llegó un pensamiento y me dijo puedes hacerlo mejor que la anterior y me salió bien, no sé de donde salieron las fuerzas, pero la verdad es que la fe que tiene uno mismo te hace sacar energías de no sé dónde”, dijo.