¿Qué son las “misteriosas bolas negras” encontradas en playas de Australia?
En octubre pasado, autoridades del distrito de Randwick en Sidney, Australia cerraron dos populares playas de la región, tras descubrir cientos de bolas negras del tamaño de una pelota de golf con un tacto viscoso. Inicialmente, se creyó que las misteriosas bolas negras eran bolas de alquitrán.
Sin embargo, una nueva investigación de la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW) reveló la verdadera composición de estas “misteriosas bolsas negras de Sidney”, en un comunicado de prensa este miércoles.
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¿Qué son las misteriosas bolas halladas en playas de Australia?
Tras análizar las “misteriosas bolas negras” que llegaron por primera vez en la playa de Coogee, los científicos descubrieron que no están compuestas de materiales naturales y que no pueden atribuirse únicamente a un derrame de petróleo, como inicialmente se creía.
Según los expertos, las bolas negras son más consistentes con “desechos generados por el hombre”.
“Descubrimos que las esferas pegajosas contenían cientos de componentes diferentes, incluidas moléculas que se derivan del aceite de cocina y la espuma de jabón, productos químicos PFAS, compuestos esteroides, medicamentos antihipertensivos, pesticidas y medicamentos veterinarios”, dijo el profesor Jon Beves, de la Facultad de Química de la UNSW.
¿Cómo fue posible saber esto?
La investigación utilizó una combinación de técnicas analíticas químicas estándar y avanzadas para revelar la composición y las posibles fuentes del material.
El primer paso fue identificar la composición de carbono de las bolas, lo que le daría al equipo una idea inicial de la composición de los escombros.
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La datación por radiocarbono de las muestras indicó que el interior de las bolas contenía aproximadamente un 70% de carbono moderno y un 30% de carbono fósil.
En tanto que la superficie estaba compuesta por aproximadamente un 85% de carbono moderno y un 15% de carbono fósil. El carbono moderno incluye el carbono derivado de plantas y animales, a diferencia de los combustibles fósiles.
“Esta combinación sugiere una mezcla de sustancias derivadas tanto de combustibles fósiles como de fuentes vegetales o animales. La mayor concentración de carbono moderno en la superficie puede deberse a la pérdida con el tiempo de componentes que se evaporan más fácilmente”, explicó Beves.
Los expertos también revelaron que el material oscuro y pegajoso estaba compuesto de una mezcla compleja de grasas, aceites, calcio y otros metales, incompatible con los típicos derrames marinos de combustible o petróleo.
Además, se identificaron marcadores de desechos fecales humanos, como el epicoprostanol y residuos de drogas recreativas como el THC (de la marihuana) y la metanfetamina, en consonancia con las contribuciones de fuentes nacionales.
¿De dónde salieron las bolas?
La presencia de grasas, aceites y altos niveles de calcio en las bolas negras sugiere que podrían estar relacionadas con manchas de grasa, aceite y grasa (FOG) que se forman comúnmente en los sistemas de alcantarillado. No obstante, el origen exacto de las bolas arrastradas sigue siendo incierto.
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Los resultados enfatizan la necesidad de un seguimiento y vigilancia continuos para identificar incidentes similares, especialmente a escalas más pequeñas donde pueden pasar desapercibidos, indicaron los expertos.
El equipo también ha sido alertado sobre informes no confirmados de bolas más pequeñas y similares que han aparecido en los últimos dos años, y investigaciones adicionales podrían revelar si tienen composiciones relacionadas o no.