En los últimos días la noticia del estado de salud de la actriz Carmen Salinas tiene en vilo al mundo del espectáculo, en una primera instancia se había informado que habría sufrido un derrame cerebral por la presión alta que padece, sin embargo, su hija aclaró que los doctores le dijeron que en realidad había sufrido una hemorragia cerebral.
Pero ¿cuál es la diferencia entre un derrame y una hemorragia cerebral? En unotv.com te decimos cuál es y también cuáles son las señales de alerta de ésta última.
¿Qué es un derrame cerebral?
El derrame cerebral ocurre cuando el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro es interrumpido como resultado de la rotura o bloqueo de un vaso sanguíneo.
¿Qué es una hemorragia cerebral?
La hemorragia cerebral es en la ruptura de un vaso sanguíneo (normalmente una arteria) que provoca sangrado tanto dentro como alrededor del encéfalo (masa nerviosa contenido dentro del cráneo). Las hemorragias cerebrales se diferencian según su localización y según la gravedad del daño.
La hemorragia cerebral se divide en:
- Hemorragia cerebral espontánea: está relacionada con la hipertensión arterial, problemas de coagulación, plaquetopenia, tumores o formación de nuevos vasos sanguíneos después de una isquemia, vasculitis, drogas o infecciones del sistema nervioso central, entre otros, y suele afectar a las personas mayores.
- Hemorragia intraventricular: afecta a los ventrículos del cerebro que contienen el líquido cefalorraquídeo. Afecta a niños prematuros, sobre todo a aquellos que han tenido síndrome de distrés respiratorio, colapso pulmonar o presión alta.
- Hemorragia subaracnoidea: afectan a jóvenes de entre 20 y 40 años y se produce en el espacio subaracnoideo, por fuera de la piamadre. Se trata de una patología grave que suele estar causada por la rotura de un aneurisma (el riesgo de rotura es proporcional a su tamaño), traumatismo craneal, uso de anticoagulantes y trastorno hemorrágico. Es común en personas mayores que han sufrido caídas o se han golpeado en la cabeza y en los jóvenes que han sufrido un accidente automovilístico.
- Hematoma subdural: localizado entre el aracnoide y la duramadre, es el sangrado por traumatismo más común. Las personas que lo padecen suelen caer en coma durante su hospitalización.
- Hematoma epidural: localizado entre la duramadre y el cráneo, puede aparecer por traumatismo cerebral. En la mayoría de los casos este tipo es la consecuencia de fractura del cráneo en niños y adolescentes.
La gravedad de cada caso dependerá de la cantidad de sangre derramada y es posible que al paciente le queden secuelas, tales como pérdida de la capacidad para comunicarse, problemas de deglución y de visión, neumonía, pérdida de sensibilidad y depresión, entre otros.
Síntomas de una hemorragia cerebral
- Debilidad o incapacidad de mover una parte del cuerpo
- Entumecimiento o pérdida de la sensibilidad
- Disminución o pérdida de la visión (puede ser parcial)
- Dificultad del lenguaje
- Incapacidad para reconocer o identificar cosas familiares
- Dolor de cabeza repentino
- Vértigo (sensación de que el mundo gira alrededor)
- Mareos
- Pérdida de coordinación
- Dificultad para deglutir
- Somnolencia, estupor, letargo, estado comatoso o inconsciente
¿Cómo prevenirla?
De acuerdo con la UNAM, es posible prevenir estos eventos cerebrovasculares llevando un estilo de vida saludable, una dieta balanceada, haciendo ejercicio y evitando otras enfermedades estrechamente relacionadas con el síndrome metabólico crónico como la obesidad, hipertensión y diabetes, por lo que son necesarios los chequeos anuales de presión arterial, colesterol y glucosa.