8M en Internet: tres ejemplos de ciberactivismo feminista que debes seguir

Como cada año, el 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, y una forma de participar activamente en él, es mediante el ciberactivismo, ya que, logra articular las luchas sociales del día a día con las tecnologías de la información, consiguiendo aumentar su impacto, asegura la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Éstas son algunas formas de ciberactivismo que puedes seguir este 8M.

Tres ejemplos de ciberactivismo el 8M

1. La Corregidora

“La Corregidora” es una página de Facebook que desde el año 2017 se dedica a “arreglar titulares incorrectos”, es decir, detecta narrativas machistas, misóginas o revictimizantes en los encabezados de los principales periódicos del país y los interviene con un lenguaje respetuoso y con perspectiva de género.

Hasta ahora, la página de “La Corregidora” tiene 153 mil seguidores y realiza publicaciones periódicas que complementa con la viralización de noticias sobre iniciativas en favor de la mujer, así como de casos de violencia de género.

Foto: Screenshot de la página de Facebook “La Corregidora”

2. Me too

El Movimiento “Me Too”, nacido en 2017 para viralizar la violencia sexual en Hollywood, una de las industrias más poderosas en todo el planeta, y que en redes sociales se difundió bajo el hashtag #MeToo logró reunir a millones de mujeres en el mundo víctimas de este delito.

Al expandirse, este movimiento llegó distintos lugares como Japón donde se registraron 1.7 millones de posts de denunciantes, mientras que en Nigeria se alcanzó casi el millón de publicaciones relacionadas con víctimas de violencia sexual.

Cifras de la Organización de las Naciones Unidas en su división de apoyo a la mujer (ONU Mujeres) revelaron que en el año 2020, más de 38 millones de post en redes sociales relacionados con el movimiento “Me Too” en distintas lenguas. .

3. Hagstag Ingrid Escamilla (#IngridEscamilla)

Un ejemplo de ciberactivismo en favor de las mujeres es el nacido en febrero del año 2020, cuando las redes sociales se llenaron de imágenes y fotos “bonitas” todas etiquetadas con el nombre de Ingrid Escamilla, egresada de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, quien fue víctima de feminicidio y cuyas imágenes de su muerte fueron filtradas a los medios.

Esta iniciativa comenzó por la usuaria de Twitter @citcitcitcit_ que propuso la publicación de imágenes de paisajes, animales, mujeres con el nombre de Ingrid y así evitar que los motores de búsqueda arrojaran las imágenes de su muerte. La iniciativa logró que, en unas horas más de seis mil personas compartieran fotos con su nombre.

Un año después el Congreso de la Ciudad de México aprobó la hoy llamada “Ley Ingrid” que busca salvaguardar la dignidad de las víctimas de un delito y se castiga hasta con 10 años de prisión a quien difunda contenido relacionado con los procedimientos derivados de éste.

Ciberactivismo en el 8M

El uso de las nuevas tecnologías, sobre todo de las redes sociales por su fácil acceso, en la exposición de demandas, denuncias y propuestas relacionadas con la lucha de género ayuda a amplificar el margen de acción y es más fácil que llegue a mucha más gente.

De acuerdo con la UNAM gracias a la accesibilidad que ofrece el ciberactivismo, las personas han podido ganar mayor libertad a la hora de consumir contenido multimedia, pues sostiene que las mujeres han pasado de ser receptoras pasivas a ser generadoras y distribuidoras de contenido.

Además, en la última década, ha visibilizado la violencia por razones de género que se viven en distintos ámbitos de la vida.

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