Los científicos utilizaron satélites de radar de alta resolución y descubrieron 19 mil volcanes submarinos, el catálogo más completo de montañas submarinas jamás creado. Antes de esto, solo una cuarta parte del lecho marino de la Tierra había sido cartografiada mediante un sonar, que utiliza ondas de sonido para detectar objetos ocultos bajo el agua.
El nuevo compendio sobre el estudio de volcanes submarinos, que se publicó el 6 de abril en la revista Earth and Space Science, podría proporcionar una mejor comprensión de las corrientes oceánicas, la tectónica de placas y el cambio climático.
Los satélites de radar no solo miden la altura del océano, también pueden ver lo que acecha en las profundidades del agua, ofreciendo una mejor representación de la topografía del fondo marino. Los científicos extrajeron datos de varios satélites, incluido el CryoSat-2 de la Agencia Espacial Europea, y descubrieron que podían detectar montículos submarinos de mil 100 metros de altura.
¿Por qué es importante cartografiar estos volcanes submarinos?
Los volcanes submarinos pueden a llegar a causar accidentes navales, explicó la revista Science. Y agregó que en 2005, el USS San Francisco de propulsión nuclear chocó con un volcán submarino a máxima velocidad, matando a un miembro de la tripulación. Sucedió nuevamente en 2021 cuando el USS Connecticut golpeó una montaña en el Mar de China Meridional.
“Además de representar peligros para la navegación, las montañas albergan minerales de tierras raras que las convierten en objetivos comerciales para los mineros de aguas profundas. Su tamaño y distribución contienen pistas sobre la tectónica de placas y el magmatismo. Son oasis cruciales para la vida marina. Y son agitadores que ayudan a controlar los flujos oceánicos a gran escala responsables de secuestrar grandes cantidades de calor y dióxido de carbono”, dijo John Lowell, hidrógrafo jefe de la Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial (NGA) a esta misma revista científica.