Una morsa gigante fue encontrada por un padre cuando caminaba con su hija por la isla irlandesa de Valentia y un enorme animal posado en las rocas los sorprendió, la historia cobró relevancia en redes sociales y se volvió viral.
Fue el pasado domingo cuando un paseo normal se volvió extraordinario, ya que al encontrar al mamífero, el sujeto supuso que era una foca en la costa británica.
Alan Houlihan, a quien avisó su hija de la presencia de una supuesta foca, no dudó al ver los colmillos y el tamaño del animal cuando éste salió del agua: “Era enorme. Tenía aproximadamente el tamaño de un toro o una vaca”, dijo a un diario local.
Viaje de la morsa: del Ártico a Irlanda
Las morsas (Odobenus rosmarus) suelen en vivir en regiones del Círculo Polar Ártico. Allí comen cangrejos, mejillones y peces y duermen sobre el hielo.
Sus colmillos les ayudan a picar en el hielo para tener más enganche mientras duermen y para ayudarse a salir del agua, así como para pelear entre ellos. Son animales imponentes: los machos llegan a pesar hasta 1,700 kilogramos.
Sin embargo, que lleguen a Irlanda no es normal. Se presume que el video de la morsa dormida prueba lo rápido que el cambio climático está afectando el deshielo de los polos.
El ejemplar se quedó descansando en el Ártico, se fue a la deriva y llegó al Atlántico medio, sin embrago, la roca en la que la morsa viajaba es parte de un iceberg que se desprendió.