Un concurso de belleza para camellos en Arabia Saudita se vio afectado esta semana por un gran escándalo: decenas de esos animales fueron descalificados, tras descubrirse que los participantes que registraron a estos animales ¡les había inyectado bótox!
Con premios de hasta 66 millones de dólares, el festival del rey Abdelaziz, una cita anual arraigada en la tradición beduina, reúne a los mejores ganaderos de camellos procedentes de todo el Golfo Pérsico.
La forma y el tamaño de los labios, el cuello y la joroba son los principales criterios de belleza para distinguir a los mejores camellos, en este concurso que se prolongará hasta mediados de enero en el desierto al noreste de Riad.
“Cuarenta y tres camellos fueron descalificados por hacer trampa, pues se encontraron 16 casos de inyecciones de bótox y 27 estiramientos faciales”.
Agencia de noticias saudita SPA
La agencia SPA precisó el pasado jueves que se detectaron casos de fraude, tras el examen físico y médico que se les realizaron a los camellos, en particular durante su paso por las máquinas de rayos X.
A view from the top of one of the Annual King Abdulaziz Festival for Camels competitions
— ꧁ Saleh صالح العزاز Alazzaz ꧂ (@saleh_alazzaz) March 23, 2021pic.twitter.com/ILhethAIJV
Y no es la primera vez que los organizadores del concurso descalifican a camellos inyectados con bótox o que son sometidos a una cirugía estética, pero esta edición cuenta con el mayor número de descalificaciones registradas desde el lanzamiento del concurso hace seis años.
En 2018, 14 camellos fueron excluidos de la competición y aunque las autoridades insisten en que estos animales sean presentados en su forma natural, las operaciones cosméticas sufridas por los animales deberían considerarse como maltratos, dijo un responsable del festival, quien pidió el anonimato.
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“Los infractores se enfrentan a fuertes sanciones y no tendrán derecho a participar en futuros concursos”.
Un responsable del festival, quien pidió el anonimato
La administración del festival del rey Abdelaziz indicó que realizaba grandes esfuerzos para evitar todas las formas de manipulación que algunos participantes usan para embellecer a sus camellos con el objetivo de aumentar su precio, buscar compradores o lograr premios en el concurso.
