Si ya aguantamos el maratón Guadalupe-Reyes, ahora nos toca el Reyes-Guadalupe complementado con la elección presidencial.
Por un lado José Antonio Meade arrancó a la carrera a la vikinga, es decir, entre el lodo con muchos obstáculos.
Mientras tanto, otros como Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle se declaran amigos de verdad.
Y la cereza en el pastel es Andrés Manuel López Obrador, quien arrancó su plan de amnistía para los narcos.