El Gobierno federal lanzó una campaña llamada Hagamos bien las cuentas en la que busca limpiar el trabajo que se ha hecho en los últimos seis años para ayudar al candidato a la presidencia José Antonio Meade que va abajo en las encuestas.
Nuestra analista Pamela Cerdeira, comenta que el problema de esta campaña es que parece que fueron asesorados por su peor enemigo, ya que a la hora de hablar sobre los gastos de los mexicanos es cuando se dan cuenta de que no hubieron buenos resultados.
Otro de los puntos a resaltar sobre este cálculo, es la medición de pobreza que cambió el INEGI en el 2006 y por la cual no podemos compararla con años anteriores.