El presidente no puede abrogar la reforma educativa, ya que es una ley que ya pasó por el Congreso; si la premisa del diálogo con la CNTE es su eliminación, ya sabemos cuál será el resultado.
Lo que hay que dejar en claro es que la mesa de discusión con el gobierno no se trata de la reforma educativa.
Nuestra especialista María Amparo Casar considera que el verdadero tema que se trata es el privilegio con el que han vivido durante años los líderes de la CNTE.
Los actos de la coordinadora están acabando con la paciencia de la sociedad, y a quien están confrontando en realidad es a la gente, los habitantes de Oaxaca.