¿Cuántas veces te has subido al Metro en hora pico, y te ha tocado al lado de una persona sudada y apestosa? Pues ¿qué crees?, una de estas personas pudo haberte contagiado de felicidad.
Un estudio llevado por científicos de Turquía y Portugal reunió a 12 hombres y 36 mujeres. Ellas tuvieron que oler el sudor de ellos, después de que fueron expuestos a diversos estímulos que generaron felicidad y miedo; el resultado fue sorprendente.