Ahora que la Secretaría de Turismo anunció que México estrena 45 nuevos Pueblos Mágicos, los cuales se suman a los 132 existentes, surge la pregunta de si este nombramiento es eterno o si alguno de estos destinos podría salir de esta lista. Por esta razón, en Unotv.com te diremos cuáles son las razones por las que un lugar puede dejar de ser un Pueblo Mágico.
¿Cuáles son las razones para dejar de ser un Pueblo Mágico?
La distinción que se le da a determinado lugar no es permanente, como mucha gente cree. Pues de no cumplir con los requisitos y compromisos que se adquieren al tener el título de Pueblo Mágico, éste podría perderse.
Año con año, cada uno de los sitios recibe una certificación del nombramiento. Un comité valora que cumpla los indicadores de evaluación de desempeño y de los criterios de certificación del programa y otros ejes no negociables.
Entre algunas de las razones que se tienen para dejar de ser un Pueblo Mágico, se encuentran: inseguridad, limpieza, ambulantaje, pérdida de imagen urbana, mala señalética, descuido del patrimonio, entre otros.
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De acuerdo con el documento Reglas de Operación del Programa Pueblos Mágicos, los criterios de certificación se dividen en tres ejes:
- Planeación (10%)
- Competitividad (40%)
- Fortalecimiento (50%).
Entre los aspectos que se toman en cuenta dentro de los criterios de certificación se hallan: planes de desarrollo turístico, desarrollo municipal, reglamento de imagen urbana; servicios de asistencia y seguridad, acciones para conservar el patrimonio tangible e intangible, difusión y promoción, sistema de información turística, monitor turístico y económico de la localidad, entre otros.
Además de estos tres ejes, existen los llamados criterios no negociables, los cuales deben cumplirse completamente:
- Comité de Pueblos Mágicos
- Compromiso de las autoridades estatales y municipales hacia el Programa
- Aplicación del Programa de reordenamiento del comercio semifijo y/o ambulante.
¿Qué pasa si un Pueblo Mágico no cumple con estos requisitos?
Si uno de estos puntos no se cumple, al menos en un 90%, en el caso de los tres ejes arriba mencionados y en su totalidad con los criterios no negociables [de acuerdo con lo que dice la Sectur], el Pueblo Mágico se hará acreedor a un apercibimiento.
Después de este dictamen, que emite el Comité Interinstitucional de Evaluación y Selección, la localidad cuenta con 90 días para hacer mejoras y así poder conservar su nombramiento como Pueblo Mágico.
Si el plazo llega y la localidad no cumple con los requerimientos, el comité le retirará el nombramiento. Sin embargo, este lugar podría volver a recuperar la distinción después de un año si c
umple las mejoras que le solicitaron.
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¿Qué pierde una población cuando deja de ser “mágica”?
Desde que se creó este programa, algunos lugares han perdido su nombramiento, aunque lo vieron a recuperar años más tarde, como en el caso de Papantla, en Veracruz; Tepoztlán, en Morelos, y Mexcaltitán, en Nayarit.
El hecho de que a un pueblo se le califique como “mágico”, le trae beneficios, entre ellos, la inyección de recursos para ampliar y mejorar aspectos como artesanías, gastronomía, comercio en general, creación y modernización de negocios turísticos locales y convertirlos en detonadores de la economía local y regional.
¿Qué es un Pueblo Mágico?
Según la Secretaría de Turismo, es aquel lugar que “tiene atributos simbólicos, leyendas, historia, hechos trascendentes, cotidianidad, en fin MAGIA que emana en cada una de sus manifestaciones socioculturales y que significan hoy día una gran oportunidad para el aprovechamiento turístico”.