La cerveza ha estado últimamente en boca de todos, debido a que la población más joven ahora se cuenta entre sus adeptos, quienes comienzan a preferir el sabor al amargo elixir debido a las famosas micheladas.
Micheladas hay de todas y para todos y aunque el término se refiere, etimológicamente, a la mezcla de cerveza con limón, un poco de sal y quizá algo de picante, lo cierto es que en la actualidad a la famosa “chela” se le mezcla con todo.
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Las micheladas que la están haciendo “entre la juventud” y uno que otro veterano que busca paliar el amargo sabor de la cebada con algo más dulce o exótico, son variadas y van desde aquella con gomitas, “panditas” y banderillas hasta las que llevan un ala de pollo, salchichas y verduras.
Micheladas que cualquier buen fan de la cerveza debe probar
1. Licuachela
La “licuachela” es una cerveza que se sirve en un vaso de plástico de licuadora (le cabe un litro) en el cual se puede mezclar de todo.
Lo estelar de esta bebida, además de su popote fluorescente para beberla, es su mezcla con “chamoy”, gomitas, limón, chile piquín y hasta una que otra verdura como un buen apio, para que no falte el toque vegano.
2. Tutsi chelas
Otra de las creaciones que últimamente han cobrado notoriedad entre quienes gustan de mezclar el trago amargo con algo más dulce son las famosas “tutsi chelas”.
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Las “tutsi chelas” son cervezas servidas, en frío, en un recipiente que emula a la clásica paleta combinada, por supuesto, con su limón, sal y chile, pero también con paletas de caramelo “para pasar el trago amargo”.
3.- Las “saludables”
En torno a la cerveza rondan muchos mitos, pero lo cierto es que, como su fabricación deviene de la cebada, aporta importantes vitaminas, principalmente del grupo B, además de carbohidratos y proteínas.
En este tenor, hay quien gusta hacer “saludable” a su bebida y la mezcla con ricas frutas frescas de temporada como mango, piña y fresa o verduras como apio y pepino. No falta aquel que, además, incluya unos buenos cacahuates, recién pelados.
4.- Las de mole y flautas de pollo
En la Ciudad de México hay un lugar, ubicado en la colonia Narvarte, en donde se ofrecen micheladas de mole poblano y flautas.
La michelada de mole se prepara al estilo de una común, pero en lugar de untarle al vaso la clásica pulpa de tamarindo o chamoy se le coloca mole, crema y queso rallado.
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Una vez escarchado el vaso con el mole, se precede a colocar la cerveza bien fría, para darle el toque final a esta peculiar bebida: dos flautas de pollo.
5.- La de chile en nogada
En septiembre del año pasado, un video se viralizó debido a que en él se observaba la preparación de micheladas de chile en nogada.
La preparación, además de una cerveza bien fría, requiere crema dulce, granada y un chile.
Con la crema se “escarcha” el vaso, al cual se le agrega alrededor la granada y un chile capeado en su interior, el cual es cubierto con cerveza.
Aunque esta michelada no ha obtenido el respaldo de los aficionados a la “chela”, lo cierto es que reproduce a aquellas que llevan ostiones, camarones y hasta piezas de pollo.
- El pilón: Si de quitar el trago amargo de la cerveza se trata, nada como una michelada de tamarindo que, para su confección, lleva, precisamente, pulpa de tamarindo, pero, además jugo de naranja, jícama, chamoy y hielo.
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La refrescante bebida puede ser servida con bolitas de tamarindo de azúcar y chile piquín para los más arriesgados.
Las 5 que te faltaban
Algunos expertos en micheladas sugieren también probar otras 5 delicias:
- Frutichela de mango
- Michebomba
- Michelada costeña
- Michelada al estilo Sinaloa
- Clamacheve
