El cuerpo experimenta un aumento del ritmo cardiaco producto del estrés que genera el miedo
Fuente: UNAM
Liberación de hormonas: cortisol y adrenalina
La adrenalina causa un estado de vigilancia alta y el cortisol ayuda a los músculos a liberar más azúcar. Ambos alertan para escapar, esconderse o enfrentar el peligro.
Fuente: UNAM
Aumento de sudoración
El ritmo cardiaco acelerado y la liberación de hormonas provocan una transpiración adicional de las glándulas endocrinas
Fuente: UNAM
Los músculos se contraen
La amígdala del cerebro, lugar donde se une la información sensorial amenazante y su contexto, provoca que los músculos se contraigan ante el peligro
Fuente: UNAM
Repercusiones cerebrales
Si la exposición al miedo es constante o prolongada, la amígdala cerebral puede aumentar de tamaño y disminuir el de otras regiones
Fuente: UNAM
Disminución del sistema inmunológico
Al liberarse el cortisol de forma continua se consume todo el azúcar del cuerpo y se reduce la respuesta inmunológica
Fuente: UNAM
Estrategias para trabajar el miedo:
· Respiración profunda· Meditación· Ejercicio· Terapias y psicoterapias