Las autoridades mexicanas informaron de un sismo con epicentro a 70 km al sur de la localidad de Coalcomán, Michoacán, a las 10:24 hora local (16:24 UTC).
El movimiento telúrico tuvo una magnitud de 4.1, así como una profundidad de 21.1 kilómetros, de acuerdo con información preliminar del Sismológico Nacional.
- No se reportan daños.
¿Qué se recomienda hacer ante un sismo?
Ante una actividad sísmica de importancia, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) hace un llamado a no caer en rumores, ni noticias falsas y solo informarse en fuentes oficiales, como las autoridades de Protección Civil, tanto locales y estatales, así como federales.
Tras un sismo, revisa tu casa en búsqueda de posibles daños, utiliza tu teléfono solo en caso de emergencia, no prendas cerillos o velas hasta asegurarte que no hay alguna fuga de gas y recuerda que se pueden presentar réplicas del sismo, por lo que es importante mantenerte alerta.
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También puedes seguir las siguientes medidas antes de un temblor: prepara un plan de protección civil, participa en simulacros de evacuación, identifica zonas de seguridad en casa, escuela o lugar de trabajo y alista una mochila de emergencia.
Durante un temblor conserva la calma y ubícate en runa zona de seguridad, aléjate de objetos que puedan caer; si estás en un vehículo, estaciónate y aléjate de edificios, árboles y postes; y si te encuentras en la costa, aléjate de la playa y refúgiate en zonas altas.
¿Por qué se producen tantos sismos en México?
México experimenta miles de sismos y actividad volcánica a lo largo de los 365 días del año. Es uno de los países más propensos a sufrirlos en el mundo debido a su ubicación geográfica en la Zona de la Falla de San Andrés. Esta zona es una zona del globo terrestre donde las placas tectónicas de América del Norte y del Pacífico se encuentran y se frotan entre sí, causando temblores que llegan a la superficie. Como resultado, se producen sismos, temblores y erupciones volcánicas en todo el país.
Además, México también está formado por una geología compleja y diversa, con una gran cantidad de fallas y zonas sísmicas activas en todo el país. Los sismos son causados por la liberación de energía acumulada en dichas fallas y las tensiones de las placas tectónicas.
En las últimas décadas, México ha sufrido terremotos muy graves, como el terremoto de magnitud 8.1 en la Ciudad de México en 1985 y el terremoto de magnitud 7.1 en la Ciudad de México en 2017, que causaron miles de muertes y daños masivos en la infraestructura. Sin ir más lejos, el más reciente fue el terremoto de Michoacán que sacudió la zona el 19 de septiembre de 2022, con una magnitud de 7.6. La catástrofe supuso graves daños en los estados de Michoacán y Colima y un recuento total de 5 muertos y 41 heridos.
Por supuesto, el país se encuentra listo para intentar prevenir daños materiales tanto como sea posible gracias a la existencia de instituciones, sistemas de alertas sísmicas y protocolos de actuación que se activan en cada suceso. No obstante, es clave remarcar la importancia de la responsabilidad de cada uno. Cada persona ha de estar preparada y tomar medidas preventivas para disminuir el riesgo de lesiones y daños en caso de un terremoto de esta magnitud.