Se registró un temblor en CDMX durante la madrugada de este sábado 29 de abril, se trata de un sismo de magnitud 2.0 en las inmediaciones de la alcaldía Milpa Alta.
El microsismo tuvo su epicentro a 4 kilómetros al suroeste de la localidad de San Salvador Cuauhtenco, Milpa Alta, en punto de las 00:43 horas de este sábado 29 de abril, con una latitud de 19.16 y una longitud de -99.11, a una profundidad de 11 kilómetros, informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN), a través de su cuenta de Twitter.
Aunque algunos usuarios de redes sociales reportaron haber percibido el movimiento telúrico, no se han registrado percances, así como autoridades capitalinas no han emitido algún reporte relacionado a la actividad sísmica registrada esta madrugada en la capital del país.
¿Por qué ocurren los microsismos en CDMX?
Luego de que en días recientes, en las alcaldías Álvaro Obregón, Magdalena Contreras, Benito Juárez y Coyoacán se registraran microsismos que sorprendieron a los capitalinos, la coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, indicó que se trata de fallas geológicas.
Asimismo, la funcionaria hizo un llamado a la población a no alarmarse, pero sí reportarlo a la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México.
“Son sismos que no han pasado magnitud de 2, son locales, son fallas geológicas pequeñas que apenas se llegan a percibir, daría el anuncio de que solamente lo registren, que lo den a conocer”
Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil
¿Qué son los microsismos?
Los microsismos son sismos pequeños que algunas veces son perceptibles y difícilmente pueden provocar algún daño a las construcciones. Se caracterizan por su poca magnitud y suelen ser constantes en los lugares tectónicos.
Los microsismos se originan debido los movimientos de las placas tectónicas. Según el Servicio de Sismológico Nacional, estas placas viajan como “bloques de corcho en agua” sobre la Astenosfera, este fenómeno provoca el movimiento de las placas y hace que se registre el movimiento aunque no sea perceptible.
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Estos movimientos son causados por diversas fuerzas geológicas, como la actividad volcánica, la tectónica de placas y la deformación del terreno. A diferencia de los sismos más grandes, que pueden causar daños significativos en edificios y estructuras, los microsismos son generalmente de baja intensidad y no suelen tener un impacto significativo en la superficie terrestre.