La semaglutida es una inyección para bajar de peso cuya creciente popularidad en Estados Unidos que se utiliza para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y como medicamento contra la obesidad. Este fármaco ha sido usado por famosos como el magnate Elon Musk, aunque los especialistas advierten por riesgos en su aplicación.
¿Qué es la semaglutida y para qué se usa?
La semaglutida es un análogo del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1), aprobado para el tratamiento de la Diabetes Mellitus 2 (DM2). Además de tener un potente efecto hipoglucemiante, ha demostrado reducir eventos CV en pacientes con esta enfermedad, y tener otra serie de efectos beneficiosos, entre los que destaca la pérdida de peso, según la Sociedad Española de Cardiología.
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Según el Instituto Nacional para la Excelencia en Salud y Atención (NICE), la evidencia muestra que la semaglutida puede ayudar a una reducción de peso de más del 10%, pues funciona como un supresor del apetito imitando una hormona intestinal llamada péptido-1, que está dirigida a las áreas del cerebro que regulan el apetito y el consumo de alimentos.
¿Cómo funciona este tratamiento?
El fármaco, que se administra con una inyección subcutánea, provoca que la persona se sienta más llena y satisfecha, lo que le hace comer menos, según una investigación de la BBC, cadena televisiva británica que destaca el hecho de que se aprobó en Reino Unido para uso en el Servicio Nacional de Salud (NHS). Cabe destacar que dicho fármaco sí está disponible para su venta en México.
Para que el tratamiento sea “seguro y efectivo para el control de peso crónico en adultos con obesidad”, según lo dicho por NICE, se deben tener las siguientes condiciones:
- Su uso debe ir acompañado de una dieta baja en calorías y programas de actividad física.
- La hormona se libera después de comer, pues ayuda a reducir la ingesta total de calorías.
- Si se implementa junto con cambios en la nutrición y el estilo de vida.
¿Cuáles son los riesgos de la semaglutida para bajar de peso?
Los usos benéficos de la semaglutida también están acompañados por riesgos, según recoge la Biblioteca Nacional de Medicina (NIH) de Estados Unidos, destacando que la inyección puede aumentar el riesgo de desarrollar tumores de la glándula tiroidea, incluyendo carcinoma medular tiroideo. Por eso, se recomienda consultar con un médico.
“Asista a todas las citas con su médico y a las de laboratorio. Su médico podría ordenar algunas pruebas de laboratorio para comprobar la respuesta de su cuerpo a la inyección de semaglutida”.
Biblioteca Nacional de Medicina (NIH) de Estados Unidos
El uso de este fármaco inyectado no sólo aumenta el riesgo de padecimientos en la tiroide, sino que cuenta con una serie de efectos secundarios, según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA):
- Náuseas
- Diarrea
- Vómitos
- Estreñimiento
- Dolor abdominal o de estómago
- Dolor de cabeza
- Fatiga
- Dispepsia (indigestión)
- Mareos
- Distensión abdominal
- Eructación
- Hipoglucemia (nivel bajo de azúcar en sangre) en pacientes con DM2
- Flatulencia (acumulación de gases)
- Gastroenteritis
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico (un tipo de trastorno digestivo).
Un artículo publicado el año pasado en la revista Variety dice que el medicamento “ha saturado la industria (del cine y entretenimiento en Hollywood) en los últimos meses, ayudando a las personas bellas y ricas a perder sus kilos de más rápidamente”.
Elon Musk afirma que la ha usado y, según algunos medios en Estados Unidos, el uso de este fármaco se ha convertido en “el secreto peor guardado de Hollywood”.
