A diario las personas presentan reflujo de forma natural, es la manera en la que el cuerpo libera la presión del estómago que produce la digestión de los alimentos.
“Todos los seres humanos podemos tener hasta 40 episodios de reflujo en 24 horas y eso se considera normal, sin embargo, no todos los reflujos que se presentan natural o normalmente se perciben o generan alguna molestia”, revela Erick Castelán, cirujano endoscopista.
Toma nota: Si después de comer siente ardor en la boca del estómago, sensación de quemazón, la comida se regresa… estas molestias no son normales, es una enfermedad por reflujo gastroesofágico.
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Según los especialistas, más del 30% de la población mexicana padece enfermedad por reflujo gastroesofágico.
“Cuando tenemos un estómago acumulado, ya sea por el consumo de alimentos altos en grasas y proteínas, permanece más tiempo y, por lo tanto, va a ser más probable que empiece con algo de reflujo; si además del alimento proteico están ahí metidos también alimentos irritantes, como pueden ser cítricos o alimentos con alto contenido de capsaicina como el picante, el reflujo empieza con todo”.
Francisco de la Vega / Especialista en endoscopia.
Al comer, el alimento pasa desde la garganta hasta el estómago a través del esófago, ahí hay una especie de compuerta que abre y cierra e impide que el alimento vuelva a subir, pero este sistema puede fallar.
“El reflujo gastroesofágico puede ser causado principalmente por una disfunción del esfínter esofágico inferior, que es la compuerta que normalmente impide el reflujo de ácido hacia arriba, desde el estómago hacia el esófago. En cierto porcentaje esta causa puede ser una hernia hiatal, por ejemplo, cuando ese esfínter esofágico inferior disfunciona, o se modifica, o cambia de posición o no tiene una adecuada presión de contención; en otro porcentaje de pacientes puede haber alguna causa funcional, es decir, que, aunque no exista una alteración anatómica pueda existir alguna disfunción de ese esfínter esofágico inferior”.
Erick Castelán / Cirujano endoscopista, Bib System.
Todo lo que genera presión al interior del estómago como el embarazo, la obesidad, el uso de ropa muy ajustada, puede provocar reflujo, pero la causa principal está en los alimentos, aquellos con mucha grasa, los cítricos, picantes y en bebidas como el café y el refresco.
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“Lo que sí es una realidad es que el consumo de ciertos alimentos aumenta la probabilidad de tener reflujo. El 80% de la asesoría tiene que ir en relación con los alimentos, ahí es donde se puede rehabilitar a la persona a un estilo de vida mucho más adecuado para no tener síntomas”, sostiene Francisco de la Vega, especialista en endoscopia y cirugía gastrointestinal.
Toma nota: Hay que tener cuidado con automedicarse, los medicamentos de libre venta pueden generar tolerancia a los síntomas y complicar el padecimiento.
“Dentro de las complicaciones son un esofagitis severa que puede ocasionar, generar o condicionar alguna úlcera. Las úlceras pueden generar sangrado, perforación y dolor. Crónicamente hablando se pueden presentar otras complicaciones como, por ejemplo, presentar esófago de Barret, que es una transformación a nivel del tejido y con el paso del tiempo, si ya se presenta el esófago de Barret y esa condición de reflujo sigue avanzando sin atenderse, puede presentarse algo que se llama displasia que ya es la antesala de presentar un cáncer esofágico”.
Erick Castelán / Cirujano endoscopista, Bib System.
Es necesario acudir con los especialistas para realizar los estudios pertinentes y dar con la causa del reflujo, la mayoría de los pacientes mejora con una alimentación balanceada y medicamentos, en algunos casos será necesario un tratamiento quirúrgico.
