¿Qué pasa si consumes manzanas todos los días?

Las manzanas representan el 12.5 % del total de frutas consumidas en el mundo, debido a su sabor y practicidad. Según estudios, consumir manzanas todos los días podría ayudar a la pérdida de peso y evitar un evento cardiovascular.
Un estudio publicado en la revista especializada The American Journal of Clinical Nutrition sugiere que consumir dos manzanas al día puede ayudar a reducir el riesgo de sufrir un evento cardiovascular (EVC), derivado de los beneficios que otorga consumir esta fruta.
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Y es que, según la investigación el consumo de dos manzanas ayuda a reducir los niveles de colesterol sérico, colesterol LDL y ICAM-1 plasmático, una proteína que aumenta en la sangre de pacientes con infarto agudo de miocardio.
Además, de causar mejoras pequeñas pero significativas en la vasodilatación microvascular dependiente del endotelio, es decir, se observaron cambios positivos en el mecanismo fisiológico que adapta el flujo sanguíneo a la demanda de los tejidos.
“Al reducir el colesterol total, el colesterol LDL y el ICAM-1, y aumentar la vasodilatación microvascular, en sujetos sanos con concentraciones séricas de colesterol ligeramente elevadas, nuestros hallazgos muestran una clara relación entre el consumo de dos manzanas diarias Renetta Canada y la mejora de los factores de riesgo de evento cardiovascular”.
Estudio
De acuerdo con los especialistas, “la capacidad potencial de las manzanas para reducir el colesterol total sérico se ha atribuido principalmente a la fracción de fibra, en particular a la pectina. Sin embargo, los polifenoles también pueden desempeñar un papel importante”.
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Por otra parte, un estudio realizado por investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) demostró que tomar un licuado de avena con manzana ayuda a disminuir el perímetro abdominal, índice de masa corporal, nivel de colesterol y nivel de triglicéridos plasmáticos.
El tratamiento consistió en que los sujetos del grupo experimental tomaron diariamente durante 30 días un licuado preparado con dos cucharadas soperas de avena y una manzana Golden delicius (amarilla) sin corazón ni semillas pero con la cáscara integra en 250 ml de agua potable. Se licuó hasta que quedó lo más homogéneo posible.
No obstante, el consumo regular de alimentos vegetales, incluidas las frutas, está asociado sistemáticamente con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular.