Después de la infección de COVID-19, muchas personas han manifestado tener “niebla mental”, asegura el neurólogo cognitivo conductual Andrew E. Budson, de la Universidad de Harvard, quien describe de qué se trata esta afección y cómo es posible superarla.
¿Qué es la niebla mental que se presenta tras sufrir COVID-19?
De acuerdo con Budson, la niebla mental no es un término médico o científico, pero es la forma en la que las personas describen cómo se sienten cuando su pensamiento es lento, confuso y no agudo.
Si bien el experto destaca que hay muchas formas en las que el COVID-19 puede dañar el cerebro, tales como la encefalitis, los accidentes cerebrovasculares y la falta de oxígeno en el cerebro, el deterioro persistente en la atención sostenida puede ser un efecto sutil de la enfermedad.
Además de los efectos directos en el cerebro, el COVID-19 también puede tener efectos a largo plazo en otros sistemas del cuerpo, generando síntomas como fatiga, dolores corporales, incapacidad para hacer ejercicio, dolor de cabeza y dificultad para dormir.
Según el experto, algunos de estos problemas pueden deberse a daños permanentes en los pulmones, el corazón, los riñones u otros órganos, lo cual puede afectar el pensamiento y la memoria, así como causar confusión mental, ya que es difícil pensar con claridad si la persona se siente fatigada, le duele el cuerpo o bien no descansó y despertó con dolor de cabeza.
¿Qué hacer para superar la niebla mental causada tras padecer COVID-19?
El experto señala que lo primero y más importante es acudir al médico para hablar de todos los síntomas que se presentan, incluyendo la confusión mental y otros síntomas neurológicos como debilidad, entumecimiento, hormigueo, pérdida del olfato o del gusto.
También se recomienda realizar actividades que ayudan a combatir la niebla mental por COVID-19, tales como:
- Realizar ejercicio aeróbico: comenzando lentamente, dos o tres minutos, algunas veces al día. Generalmente, se recomienda ejercitarse durante 30 minutos al día, cinco días a la semana.
- Dieta nutritiva: seguir una dieta saludable que incluya aceite de oliva, frutas, verduras, nueces, frijoles y granos integrales mejora el pensamiento, la memoria y la salud general del cerebro.
- Evitar alcohol y drogas: evitar sustancias que afecten negativamente el cerebro será de gran utilidad.
- Dormir bien: debido a que el sueño es un momento en el que el cerebro y el cuerpo pueden eliminar toxinas y trabajar hacia la curación, se recomienda dar al cuerpo el sueño y descanso que necesita.
- Participar en actividades sociales: las actividades sociales benefician el estado de ánimo y ayudan al pensamiento y memoria.
- Realizar actividades beneficiosas: participar en actividades novedosas y cognitivamente estimulantes como escuchar música, practicar la atención plena y tener una actitud mental positiva serán de gran ayuda para combatir la niebla mental por COVID-19.