La combustión de un puro contiene el conocimiento de una terapia milenaria de la medicina tradicional china: la moxibustión, el calor sanador que quita el dolor.
“La moxibustión no es más que la quema del puro moxa que está hecho de la hierba de Artemisa, esta técnica se aplica sobre el paciente como un tipo de fisioterapia de calor”, señala Juliens Herrera, especialista en medicina tradicional china.
El olor de la moxa y el calor que desprende su encendido puede ayudar a mitigar el dolor en articulaciones, rigidez, incluso dolores menstruales.
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Juana, una de las pacientes, busca aliviar el dolor de brazos y espalda.
“Ese dolor ya es muy seguido, no me deja ni dormir, ni moverme, así como yo quisiera. Por ese motivo vine”, señala la mujer.
Previo a un diagnóstico que permite conocer el estilo de vida y molestias que se presentan, el paciente se recuesta con la zona afectada al descubierto.
“Tiene varias formas de aplicación: puede ser a través del puro, puede ser en conos, la caja de moxa o con las agujas con moxa”, detalla Juliens Herrera.
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En el caso de Juana, los puntos de aplicación de la moxa son los mismos en los que se insertan agujas en la acupuntura, también se empleará el puro y los conos.
“Este es el punto del elemento metal y se utiliza principalmente para las afecciones tendinomusculares“, explica el experto.
El calor sanador que produce la combustión de la moxa, nunca debe de aplicarse directamente en la piel.
“Como tal, es una terapia muy noble, pero que hay que tener ciertos cuidados, el cuidado que es en quemar al paciente en pasarte el tiempo de calor que se le debe de dar”.
Juliens Herrera / Especialista en medicina tradicional china.
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Tras casi media hora de sesión, el cuerpo se relaja, producto de las propiedades antiinflamatorias, antiespasmódicas, antisépticas, incluso antidepresivas de la planta Artemisa con la que se elabora la moxa.
“En este momento me siento bien, siento el cuerpo todo relajado”, asegura Juana, tras haberse sometido al tratamiento.
Aunque a simple vista es una terapia sencilla, no cualquiera puede aplicarla, debe de ser un especialista certificado en medicina tradicional china y no es recomendable para mujeres embarazadas o personas con problemas en la piel.