México es el país que más refrescos consume en el mundo, sin embargo, el consumo excesivo de refrescos puede causar obesidad y desencadenar enfermedades cardiovasculares. Pero ¿qué contienen los refrescos que son tan malos para la salud?
¿Qué contienen los refrescos?
De acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), para elaborar un refresco los fabricantes incluyen una serie de ingredientes, entre los que se incluyen:
- Agua natural, gasificada o mineralizada
- Azúcar o sacarosa
- Jarabe de alta fructuosa
- Jarabe de azúcar de caña
- Jugo de frutas
- Conservadores
- Colorantes
- Saborizantes
- Cafeína
- Edulcorantes no calóricos
- Acidulantes
En el caso de los conservadores estos pueden ser benzoato de sodio o sorbato de sodio. Sin embargo, algunos refrescos no los contienen, ya que, dentro de su composición tienen ácidos fuertes que hacen que las bebidas tengan pH entre 2 y 7, rango en el cual no es propicio el desarrollo de microorganismos.
También, en cuanto a la cafeína y los edulcorantes no calóricos, su uso o no depende del tipo y composición de la bebida, por lo que no todos los refrescos los contienen.
Azúcar y azúcares no es lo mismo
La Profeco destaca que no es lo mismo azúcar que azúcares, no obstante, ambos se encuentran presentes en los refrescos. Según la Procuraduría, el azúcar común, también llamada sacarosa, se obtiene de la caña de azúcar o de la remolacha azucarera. Mientras que los azúcares son un tipo de carbohidratos que se pueden encontrar en los alimentos o bebidas o bien pueden añadirse. Algunos de ellos son:
- Fructosa (tipo de azúcar encontrado en vegetales, frutas o la miel)
- Glucosa o Dextrosa (azúcar simple hecho de maíz o trigo)
- Jarabe de maíz de alta fructosa (glucosa altamente procesada)
- Jarabe de maíz (azúcar obtenido del maíz)
- Azúcar invertido (sacarosa hidrolizada)
Según las autoridades mexicanas, el Jarabe de Maíz de Alta Fructosa (JMAF) ha causado mucha polémica, pues está asociado a que la persona que consume una bebida o alimento que lo contenga, no siente saciedad, por lo que sigue comiendo.
Los azúcares pueden ocasionar aumento de peso si se consumen en exceso. Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) recomiendan que se reduzca el consumo de azúcares libres a 50 g, aunque es mejor si se reduce a 25 g al día.
Sin azúcar, pero con edulcorantes no calóricos
Si bien, muchos refrescos declaran no contener azúcares, es posible que estos contengan aditivos alimentarios que pueden agregarse a los alimentos y bebidas en reemplazo del azúcar. Algunos de estos son:
- Aspartame (200 veces más dulce que el azúcar)
- Acesulfame K (200 veces más dulce que el azúcar)
- Sucralosa (600 veces más dulce que el azúcar)
- Estevia (300 veces más dulce que el azúcar)
- Ciclamato de sodio (30 veces más dulce que el azúcar)
No obstante, expertos aseguran que los sustitutos de azúcar tienen efectos metabólicos negativos como:
- Disminución en la sensibilidad de la insulina
- Aumento de concentración de glucosa sanguínea
- Habituación al sabor dulce en la población infantil
Refrescos y sus efectos dañinos a la salud
El sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. Su causa fundamental es un desequilibrio energético entre las calorías consumidas y gastadas.
En el caso de la obesidad éste es un problema de salud pública que con frecuencia se liga al consumo de bebidas saborizadas, como los refrescos, por sus contenidos de azúcares. De hecho, la OMS, considera la obesidad como un problema que ha adquirido proporciones de epidemia. Y es que, más de cuatro millones de personas mueren cada año por causas relacionadas con el sobrepeso o la obesidad, según estimaciones del 2017 sobre la carga mundial de morbilidad.
En el caso de México, desde 1999 se observó un incremento en sobrepeso y obesidad en toda la población. Sin embargo, su incidencia ha sido mayor entre:
- Mujeres en edad reproductiva
- Residentes de zonas rurales
Por otro lado, en el 2016, en el país, 72.5% de los adultos presentaron sobrepeso y obesidad.
Entre las enfermedades ligadas a la obesidad se encuentran:
- Diabetes mellitus
- Hipertensión
- Enfermedades cerebrovasculares
- Cáncer
Consumo de cafeína en niños
Además, la Profeco señala que la principal fuente de consumo de cafeína son las bebidas azucaras como los refrescos de cola. El consumo de cafeína en niños se ha asociado con distintas afecciones, como:
• Episodios de hiperactividad
• Ansiedad
• Alteraciones de patrones del sueño como insomnio