El arroz proporciona el 20% de la ingesta de proteína alimentaria en el mundo, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Sin embargo, expertos recomiendan lavar el arroz antes de cocinarlo y explican un nuevo método para hacerlo para que no pierda sus nutrientes.
¿Por qué recomiendan lavar el arroz?
Expertos en cocina aseguran que el arroz generalmente necesita lavarse antes de cocinar para eliminar su capa de almidón.
“No lavarlo hace que el arroz huela más mal y se eche a perder más rápido”, según un artículo del diario inglés The Guardian.
Otra de las razones por la que se recomienda lavar el arroz es para ayudar a eliminar la suciedad y el arsénico que puedan contener los granos, según Manoj Menon , científico ambiental del suelo de la Universidad de Sheffield.
“El arsénico inorgánico (iAs) es un carcinógeno del grupo 1, y el consumo de arroz puede ser una vía importante de exposición al iAs en la cadena alimentaria. Aunque existen regulaciones para controlar los iAs para el arroz comercializado en algunos países, se exploran medidas adicionales para eliminar el arsénico del arroz”.
Estudio
Sin embargo, la FAO destaca que remojar el arroz antes de cocinarlo puede restarle proteínas valiosas, así como otros nutrientes solubles en agua. Por ello, Manoj y un grupo de científicos descubrieron una forma de cocinarlo y retener estos nutrientes, cuyo nombre es “método de sancochado con absorción”.
Método del “sancochado”, la forma correcta de lavar el arroz
Expertos consideran que para que el arroz no pierda sus nutrientes se debe lavar con el método del “sancochado”, el cual consta de los siguientes pasos:
- Ponga cuatro tazas de agua a hervir en una olla grande
- Agregue una taza de arroz crudo al agua hirviendo por cinco minutos
- Quite el agua, este es un paso de “lavado” sustituto
- Agregue dos tazas de agua limpia
- Cocine a fuego bajo y tape la olla hasta que se absorba toda el agua
Este método, publicado en la revista Science of The Total Environment, no solo retuvo los micronutrientes del arroz como el fósforo, el potasio, el magnesio, el zinc y el manganeso, sino que también redujo el arsénico en 73% en el arroz blanco y 54% en el integral.
¿Cuándo no se debe usar este método de “lavado?
El experto recomienda no usar este método, así como tampoco remojarlo de forma tradicional si el arroz viene fortificado.
“No es una práctica recomendada cuando el arroz está fortificado con micronutrientes; revisa la etiqueta si está fortificado o no”, dijo Menon durante una entrevista a la revista Inverse.
Y agregó: “Lavar el arroz fortificado conducirá a la pérdida de nutrientes agregados para abordar las deficiencias de micronutrientes”.