¿Deberías secarte las manos después de lavarlas? La respuesta es sí, según diversos expertos en salud como la Clínica Mayo en Estados Unidos, quien explicó que las manos húmedas propagan los gérmenes con mayor facilidad que las manos secas.
Por su parte, la organización de consumidores de Estados Unidos, Consumer Reports, reforzó la postura tras preguntarle a diferentes especialistas médicos como la Dra. Heather Viola.
“Definitivamente debes secarte las manos después de lavarlas. De hecho, las manos húmedas pueden propagar mil veces más bacterias que las manos secas“.
Heather Viola, médica de atención primaria en Mount Sinai Doctors Ansonia
“Otro beneficio es que al secarse las manos puede reducir el nivel de microbios restantes, incluidas las bacterias, que quedan en ellas”, recomendó la organización estadounidense.
¿Cómo debes secarte las manos después de lavarlas?
Frotarte las manos para crear fricción ayudará a eliminar los gérmenes y a secarte las manos con mayor eficacia, dijo Heather. Y recomendó evitar secarte las manos en la ropa.
“Si tu ropa está sucia, podría contaminar tus manos nuevamente y reducir los beneficios de lavarte las manos”.
Heather Viola, médica de atención primaria en Mount Sinai Doctors Ansonia
¿Es recomendable el secador de aire caliente para secar las manos después de lavadas?
No hay evidencia científica concluyente que indique que usar una toalla de papel o un secador de manos de aire sea la mejor manera de reducir los gérmenes en las mano, de acuerdo con la página de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Pero, qué es mejor: ¿papel o aire?
Con los secadores de aire, se corre el riesgo de que el agua, potencialmente contaminada con gérmenes, salga volando, dijo a Consumer Reports, Alexandra Seguin, especialista en prevención de infecciones en el Centro Médico de la Universidad Rush.
Pero aclaró que existen estudios que muestran que los niveles de contaminación de los secadores de aire no son significativos.
Sin embargo, expertos e instituciones médicas coinciden sobre la importancia de lavarse las manos y secarlas correctamente para evitar la propagación de gérmenes.